La firma de hipotecas bajó un 2% en febrero respecto al mismo mes del año anterior, hasta los 35.900 préstamos. La cifra vuelve a tasas negativas después de que en enero subiera un 2,9%, aunque hay que recordar que la caída de diciembre fue del 8,8% tras 21 meses de ascensos interanuales consecutivos, según datos publicados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística INE.

Baja el número de hipotecas pero sube el importe medio de las mismas, un 1,2%, hasta los 143.413 euros, mientras que el capital prestado por los bancos, alcanzó los 5.148,5 millones de euros, bajando un 0,9%. Tras al alza de tipos de interés acordada por los bancos centrales para intentar contener la inflación, el tipo de interés medio para el total de préstamos hipotecarios se situó en el 3,21%,la cifra más elevada desde marzo de 2017, con un plazo medio de 23 años. En el caso de las viviendas, el interés medio fue del 2.86%, también el valor más alto desde mayo de 2017, con un plazo medio de 24 años.

Y entre tipo fijo y variable, parece que el fijo sigue siendo el favorito por los hipotecados, aunque el porcentaje sigue bajando mes tras mes: el 65.7% de las firmas se constituyeron bajo tipo fijo. El tipo de interés medio al inicio fue del 2,70% para las hipotecas sobre viviendas a tipo variable y del 2,96% en el caso de las de tipo fijo. Y ojo, el tipo fijo marca mínimos, no porque esté dejando de ser el que prefieren los hipotecados, sino porque los bancos, ante el alza de los tipos de interés, prefieren el variable.

Y atención también, porque el precio de la vivienda usada se ha estancado en marzo y la compraventa de viviendas ha vuelto a tasas negativas en febrero. A lo que hay que sumar que estos datos llegan días después del anuncio de la nueva Ley de Vivienda comunista, que se aprobará mañana en el Congreso y que traerá una fuerte intervención en el mercado: por ejemplo, topes en el alquiler y que una persona con cinco inmuebles se considere 'gran tenedor', lo que afectará de lleno al mercado inmobiliario.