El domingo 14 de mayo habrá elecciones presidenciales en Turquía, las primeras en veinte años que podría perder el actual presidente, Recep Tayyip Erdogan, cuyo delicado estado de salud le impidió celebrar dos mítines de campaña. Las encuestas, para más inri, no le dan como favorito, tras los terremotos y, sobre todo, tras la loca política económica de su gobierno, es decir, de él mismo, que ha llevado a la lira turca a mínimos históricos y a una inflación disparada que en marzo se moderó hasta el 50,5%.

Muy sorprendentes fueron los ceses de los gobernadores del Banco Central de Turquía, por oponerse a la bajada de tipos de interés ordenada por Erdogan cuando el IPC superaba el 80%.Pues eso, que al regulador BCE parce que los escenarios posibles de los que habla Genç resultan demasiado distintos y, alguno, peligroso. Mismamente, que repita Erdogan, el valedor de don Onur.

Preguntado el CEO del BBVA, el turco Onur Genç, sobre las elecciones en su país, no quiso meterse en harina política, pero sí afirmó que la entidad está preparada para afrontar cualquier escenario. ¿Seguro? Para empezar, el negocio en aquel país se ha debilitado enormemente tras los terremotos de febrero, pero no nos engañemos: ya estaba muy tocado por la depreciación de la lira y la inflación disparada, situaciones que Erdogan no supo enderezar. ¿Qué pasa si vuelve a ganar -nunca menosprecien las opciones de victoria de un demócrata como él- y mantiene su política económica tan exitosa? ¿Y si gana la oposición y la situación económica empeora? Según Genç, no pasa nada, porque el BBVA está preparado para todo. Ya lo veremos.

Por cierto, el CEO afirmó que el banco tiene un exceso de capital de 4.000 millones de euros, que empleará para pagar un dividendo extra o para recomprar acciones, que es otra manera de remunerar al accionista. ¿Y por qué no los invierte el banco para ampliar el negocio?

Eso es lo que se ha hecho toda la vida: los beneficios se reinvierten para que en un futuro aumenten los beneficios recurrentes y poder aumentar la remuneración al accionista. Porque, tanto la recompra de acciones como los dividendos extraordinarios, son pan para hoy, pero una vez repartidos ya no se pueden volver a repartir. ¿No será que ni el presidente, Carlos Torres, ni el propio Onur Genç saben dónde invertir esos 4.000 millones?

Y sí, el BBVA ha subido en bolsa este jueves un 3,1%, más que el Ibex (+0,2%) y más que el resto de bancos. Pero es pan para hoy…