Parece que Baby Shark no sólo arrasa en YouTube. Y es que su dueña, la compañía surcoreana de entretenimiento educativo The Pinkfong Company, se ha disparado casi un 62% (en concreto, un 61,8%) en su debut bursátil en la bolsa de su país.
Recuerden que la famosa canción infantil lleva más de 16.424 millones de visualizaciones en YouTube desde el 18 de junio de 2016, dentro de un canal que cuenta con más de 83,7 millones de suscriptores. Además, también está disponible en Amazon Prime Vídeo, Spotify y Apple Music, entre otras plataformas. Recuerden que se trataba de una canción famosa en campamentos y patios escolares desde hace décadas en EEUU y Reino Unido, pero la versión de Pinkfong que realizó el compositor Jin Jin optó por la simplicidad, incorporando un verso repetitivo que se entendiera en todo el mundo (el famoso doo, doo, doo, doo, doo) y agregar música con el estilo del famoso pop coreano denominado K-pop.
La compañía Pinkfong surgió en junio de 2010 y vio su filón en las canciones infantiles a través de vídeos de Internet. Dado su gran éxito con Baby Shark, que cuenta hasta con una versión villancico, ahora ha dado el salto al parqué. El CEO de Pinkfong, Kim Min-seok, ha anunciado que acortarán el ciclo de lanzamiento de contenidos “utilizando tecnología de inteligencia artificial y datos, y estableceremos un nuevo estándar para el mercado global de contenido familiar”.
En su estreno en el parqué, Pinkfong ha pasado del precio del debut (38.000 wones, unos 22,41 euros) a dispararse un 61,8% hasta un máximo de 61.500 wones (unos 36,27 euros). Eso sí, al cierre de la sesión se ha situado en 41.550 wones (unos 24,51 euros), lo que supone una revalorización del 9,34%.
Pinkfong planea invertir los fondos obtenidos en bolsa en desarrollar y lanzar nuevas propiedades intelectuales, así como mejorar el proceso de producción, producir animaciones de alta calidad y expandir el negocio global de entretenimiento. Parece que a Disney, Netflix, Amazon Prime Video, Warner Bros. Discovery, Paramount Skydance... les ha salido un competidor en lo que a contenidos de animación infantil se refiere. Además, no hay que olvidar que a muchas de estas plataformas ahora les faltan ideas para crear nuevos contenidos... y se les da mucho mejor seguir estirando sus películas más exitosas.
Y Baby Shark es una muestra más de la colonización asiática de Europa y del resto del mundo, cuya última muestra se ha podido ver en MediaMarkt, Wallapop y los muñecos Labubu, así como en el sector automovilístico.
