Pop Mart se frota las manos con los famosos Labubu, otra muestra más de la creciente colonización asiática de Europa. Y es que la empresa china de juguetes se ha disparado en bolsa (donde su cotización ha subido un 12,5%), tras triplicar ingresos y quintuplicar beneficios en el primer semestre, gracias, en gran parte, al éxito de sus peluches con aspecto de monstruo más allá de sus fronteras.

Los ingresos de Pop Mart se han triplicado, alcanzando unos 1.656 millones de euros. De estos, casi el 60% (en concreto, el 59,7%) proceden de China, donde ha ingresado 989 millones, un 135% más que hace un año. El 41,3% restante de la facturación llega del negocio internacional, destacando los fuertes aumentos registrados en América (donde ha ingresado 270 millones, 12 veces más) y en Europa (cuyos ingresos se han multiplicado por ocho, alcanzando los 57 millones), y en Asia Pacífico la cifra de negocio ha crecido un 258%, a 340 millones.

Por su parte, el beneficio neto se ha quintuplicando, hasta los 546 millones. Ante los buenos números obtenidos en el primer semestre, Pop Mart ha elevado sus previsiones anuales. Asimismo, no teme los aranceles impuestos por Donald Trump, pues en EEUU tiene unas 40 tiendas y prevé continuar con la expansión y sumar otras 10 este año.

Esta empresa china de juguetes, que cuenta con parques de atracciones propios, se ha disparado con el éxito de los Labubu, y su director ejecutivo, Wang Ning, ha anunciado el inminente lanzamiento de una versión mini. Cabe recordar que los Labubu son unos peluches coleccionables diseñados por el hongkonés Kasing Lung, que son una especie de elfo con aspecto de monstruo que formaba parte de unos cuentos de Lung denominada The Monsters, influenciados por el folclore y la mitología de los países nórdicos. Labubu se ha convertido en el producto más exitoso de Pop Mart por varios factores: los llevan muchos personajes famosos (como las cantantes Rihanna o Lisa de la banda de K-pop Blackpink, entre otros), son coleccionables, salen en los videojuegos gacha (donde los jugadores logran premios que se pagan con monedas virtuales) y se suelen vender en cajas sorpresa... de forma que el comprador no sabe cual está adquiriendo. Todo esto se ve favorecido no sólo por el éxito del K-pop de Corea del Sur, sino por la tendencia que se ve entre los jóvenes de allí y que ya se ha extendido a otros países, incluido España, de que ante la imposibilidad de ahorrar para comprar una vivienda (en nuestro país se necesitan unos 18 años de sueldo íntegro para adquirir una vivenda de unos 80 metros cuadrados) no tienen reparos en gastar el dinero en cosas materiales de las que disfrutar a corto plazo. Además, tras la pandemia del Covid-19, se da mucha más importancia al disfrute a corto plazo y las experiencias que al ahorro.