Es lo que ocurre con los abstemios como Rodríguez Zapatero: no necesitan de alcohol para sufrir ‘delirium tremens’. Y lo malo es que ZP, que no Felipe González, constituye el modelo de socialismo a seguir por Pedro Sánchez.

De repente ZP, como un castrista cualquiera, asegura que la culpa de la huida de venezolanos al exterior no la tiene Nicolás Maduro, sino Donald Trump, por el embargo económico (que no es tal) a Venezuela.

Podemos no permite que el Gobierno español participe en la campaña mundial para acabar con el “neocomunismo” venezolano

Horas más tarde, en una de sus mejores intervenciones desde que accedió al poder en Génova, Pablo Casado, recordó que España tiene la obligación de ayudar a Venezuela porque “Iberoamérica (que no la tontuna de ‘América Latina’) no se entiende sin España”. También dijo, y citó ejemplos concretos, que, en el Aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid, a los venezolanos se les devuelve “en caliente” a su patria para que sean triturados por el canalla de Nicolás Maduro.

Pedro Sánchez no mueve un dedo, naturalmente, porque, aunque ZP maniobrara en su día a favor de Susana Díaz, lo cierto es que Sánchez es un insensato y no sigue los pasos de Felipe González, sino que imita a ZP. También, porque Podemos no le permitiría hacerlo. Y ahora Podemos manda mucho.

El neocomunismo no pretende la revolución, sino la manipulación de la democracia

Después de todo, no de extrañar: España se está volviendo bolivariana. Y no es malo que, por primera vez, un líder político español, el nuevo presidente del PP, hable de “neocomunismo”. Es decir, Podemos o Hugo Chávez, que pretenden –y consiguen- llegar al poder mediante las urnas, para luego manipular todo el sistema democrático y, a la postre, terminar con las libertades individuales (observen lo poquísimo que hablan Sánchez e Iglesias, de libertades: solo de ‘igualdad’ y de ‘derechos’). Los neocomunistas con los que piensan que la revolución ya no es necesaria: se puede llegar al poder mediante la manipulación de la democracia. En ello está Pablo Iglesias y en ello cae Pedro Sánchez… capaz de cualquier insensatez con tal de mantenerse en el sillón de Moncloa… partido a partido.