La variación mensual del Índice de Producción Industrial (IPI) entre los meses de abril y marzo, eliminando los efectos estacionales y de calendario, es del −21,8%. Esta tasa es 8,6 puntos inferior a la observada en marzo, ha publicado hoy el INE.

Mientras que el Índice de Producción Industrial corregido de efectos estacionales y de calendario presenta en abril una variación del −33,6% respecto al mismo mes del año anterior. Esta tasa es 19,9 puntos inferior a la registrada en marzo. La serie original del IPI experimenta una variación anual del −33,6%. Esta tasa es 21,9 puntos inferior a la del mes de marzo.

El INE explica que la declaración del estado de alarma y la entrada en vigor del permiso retribuido recuperable para las personas trabajadoras por cuenta ajena que no prestaban servicios esenciales, han provocado una paralización casi total de la mayor parte del tejido productivo industrial durante la primera parte de abril y una posterior reincorporación paulatina y escalonada de la actividad. A nivel global, la producción industrial ha bajado este mes un 33,6% en tasa anual.

La industria automovilística ha sido la más afectada por estas circunstancias, con un descenso de su producción del 92,0% respecto al mes de abril del año pasado

La industria automovilística ha sido la más afectada por estas circunstancias, con un descenso de su producción del 92,0% respecto al mes de abril del año pasado.

Además, la situación de confinamiento de los hogares ha provocado una fuerte reducción de la demanda de bienes personales y para el hogar. Debido a ello, la confección de prendas de vestir, la industria del cuero y calzado y la fabricación de muebles registran descensos en su producción superiores al 70%.

Aunque los productos alimenticios han sido los bienes que mayoritariamente han consumido los hogares durante el estado de alarma, la industria de la alimentación también ha bajado su ritmo de producción (un 7,3% en tasa anual, frente a la subida del 3,6% en marzo). No obstante, la producción de conservas, tanto de pescado, como de frutas y hortalizas y la fabricación de productos de molinería y de productos para la alimentación animal, han mantenido tasas anuales positivas.

Mientras que la fabricación de productos farmacéuticos ha registrado la menor bajada de toda la industria, con una tasa anual del −0,4%.

En definitiva, estamos ante otro 'exito' del confinamiento decretado por Pedro Sánchez, que ni siquiera ha servido para evitar que España sea el país del mundo con más muertos y más contagiados por habitante.