• El ministro griego de Economía Varufakis insiste en que el Gobierno heleno no reconoce a la troika como interlocutora válida en las negociaciones sobre el programa de rescate de Grecia.
  • La Comisión Europa está dispuesta a buscar otro mecanismo de supervisión que satisfaga tanto al Ejecutivo griego como a los prestamistas. 

El nuevo primer ministro griego, Alexis Tsipras (en la imagen), llegó hoy lunes a Chipre en su primera visita oficial como jefe de Gobierno, con la cual abre una gira europea a la que seguirán visitas a Italia y Francia.

Eso, después de que su nuevo ministro de Finanzas, Yanis Varufakis, diese un susto a Europa cuando afirmó que el Gobierno griego no reconoce a la troika (Comisión Europea-FMI-BCE), como interlocutora válida en las negociaciones sobre el programa de rescate de Grecia. "No tenemos intención de trabajar con una comisión que no tiene razón de existir, incluso desde la perspectiva del Parlamento Europeo", dijo Varufakis.

Pero parece que la UE ha recogido el órdago de Varufakis. Porque el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, está dispuesto a desmantelar la misión de los prestamistas internacionales que forman la Troika, tal y como ha puesto Syriza sobre la mesa de negociaciones, y buscar a cambio otro mecanismo de supervisión que satisfaga tanto al gobierno griego como a los prestamistas. "Tenemos que encontrar una alternativa rápidamente", han informado fuentes de la Comisión Europea al diario económico alemán "Handelsblatt".

Y es que, efectivamente, Alexis Tsipras ha hecho saber a la Comisión y al gobierno alemán que no desea seguir cooperando con los inspectores de la Troika, los conocidos como "hombres de negro", pero a su vez está dispuesto a seguir negociando con las instituciones a las que representan.  

A todo esto, Varufakis, en una entrevista publicada por Le Monde un día después de su paso por París para entrevistarse con su homólogo francés, Michel Sapin, insistió en su voluntad de modificar el programa de rescate de Grecia porque se basaba en "una lógica errónea".

"Los dos principales errores de los gobiernos griegos desde hace decenas de años son el recurso constante al endeudamiento sin pensar en el futuro y la ausencia de reformas. Eso lo vamos a parar", señaló.

Sin responder directamente a qué alternativa tiene a los 7.000 millones de euros del próximo pago previsto por la troika que Atenas debía recibir y que su Gobierno rechaza mientras no se adopte un nuevo plan, indicó que sí esperan encontrar "espacio presupuestario en las próximas semanas".

Pero Europa sigue en vilo con los griegos...

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com