Panorama delicado en DIA. Está esperando la OPA del ruso Mikhail Fridman… sin que el regulador, o sea, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que preside Sebastián Albella, diga nada ante los numerosos ataques de bajistas que han depreciado el valor casi un 40%.

Los bajistas tienen un 16,88% del capital, según los últimos datos. Mientras, Fridman es dueño del 25% a través de la sociedad luxemburguesa Letterone. De este porcentaje, un 15% lo tiene en derechos reales de voto y otro 10% en instrumentos financieros con derecho a ejercer la opción de compra antes de noviembre, aunque podría hacerlo antes. Es el primer accionista y ya presiona en la toma de decisiones ante los retos con sus dos sillas en el consejo (las ocupadas por Karl-Heinz Holland y Stephen DuCharme). Le sigue el banco de inversión estadounidense Goldman Sachs, que posee el 13,85% del capital, según DIA.

En pleno carrusel bursátil, el regulador del mercado calla

Un contexto que no es baladí y más este jueves, cuando se han conocido sus malos resultados de primer semestre. En la apertura, la bolsa ha reaccionado con caídas de hasta el 5%, pero a lo largo de la sesión, el valor ha cambiado de rumbo, anotándose subidas superiores al 10% (+10,47%, hasta los 2,289 euros por acción). Algo que cuesta entender por la elevada depreciación que arrastra por culpa, sobre todo, de los bajistas, y las caídas en ganancias y ventas.

La fuerte competencia le ha forzado a reducir precios con la consiguiente erosión en márgenes, subrayan los analistas 

En concreto, el beneficio neto se ha desplomado un 88,8% respecto al primer semestre de 2017, situándose en los seis millones de euros. Asimismo, la fuerte competencia en Iberia (España y Portugal) ha forzado al grupo a reducir precios con la consiguiente erosión en márgenes y el tipo de cambio ha tenido un impacto negativo en mercados emergentes (Argentina y Brasil), provocando un fuerte descenso en el Ebitda (-19%), según han destacado los analistas de Bankinter.

Por su parte, las ventas no han andado mucho mejor: las brutas bajo enseña han sido de 4.600 millones (-9,2%) y las netas, de 3.796 millones (-10,5%). De estas, las de los emergentes se han desplomado un 20,1%, hasta los 1.253,9 millones; las de Portugal han bajado un 4,9%, a 310,3 millones y las de España, un 4,5%, a 2.542 millones.

Por último, destacar la floja generación de caja (172,8 millones, un 15,6% menos que hace un año) y que la deuda neta ha aumentado en 339 millones en el primer semestre, situándose en 1.230 millones (un 20,6% superior a la de hace un año). Esto último se debe al débil comportamiento de ventas, la caída de los márgenes y el mayor volumen de inversiones para transformación de las tiendas... a pesar de que no parece que este teniendo efectos...