En Argentina, y con el 97% de los votos escrutados, el peronista y kirchnerista Alberto Fernández ha obtenido el 48,1% de los sufragios, lo que le convertirá en presidente sin necesidad de una segunda vuelta. El hasta ahora presidente, Mauricio Macri  -de ‘Juntos por el Cambio’-,  obtuvo el 40,4% y Roberto Lavagna un 6,2%.

Alberto Fernández -que tiene a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner como vicepresidenta en su partido ‘Frente de Todos’-  se reunirá este mismo lunes con Macri para acordar una transición de poderes ordenada, que tendrá lugar el 10 de diciembre.

El presidente electo advirtió a la multitud que celebraba la victoria que «vienen tiempos difíciles», y prometió que gobernaría «para la gente, para todos». Cristina Fernández, senadora desde 2017 y por ello con fueros parlamentarios, es investigada en varias causas por presunta corrupción y hay en curso un juicio oral en su contra.

El único candidato provida en estas elecciones, Juan José Gómez Centurión, obtuvo un magro 1,7%, recuerda Infocatólica.

El único candidato provida en estas elecciones, Juan José Gómez Centurión, obtuvo un magro 1,7%"

Y es que, entre los planes de Fernández, que tendrá como vicepresidenta a Cristina Fernández de Kirchner, figura la legalización del aborto. Fernández dijo a los medios de comunicación que tiene “la decisión política” de aprobar el aborto porque no quiere “que se muera ninguna mujer más”. Para lograrlo, dijo que en primer lugar despenalizaría el aborto para que deje de ser clandestino, y luego sería legalizado, recogió Aciprensa

Así que con la victoria del peronista Fernández, peligra la vida de miles de niños no nacidos, si cumple su palabra y legaliza el aborto…

El aborto atenta contra la ley natural porque todo el mundo puede saber con su sola razón que matar a un niño en el vientre de su madre es un asesinato. Y la ley natural pide que ese niño siga viviendo. 

Con los peronistas vuelve la corrupción de la subvención pública y del robo

Eso sí, resutla que Mauricio Macri tampoco es un defensor de la vida.

El salto que dieron la inflación, el desempleo y la pobreza fueron el talón de Aquiles de Macri y de su alianza de centroderecha Juntos por el Cambio, que igualmente conserva un núcleo duro de votantes que ven en él a un impulsor de la transparencia y de las obras públicas, recuerda Reuters.

Macri había propuesto avanzar con la apertura de la economía y el ajuste del Estado, aunque la agudización de la crisis disparada en agosto lo llevó a tomar algunas medidas que sirvieron como leves paliativos sociales.

Fernández, en cambio, es proclive a una mayor intervención estatal para impulsar el mercado doméstico y hacer crecer la actividad, actualmente en contracción.

Con los peronistas vuelve la corrupción de la subvención pública y del robo. Y la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner consigue la impunidad, gracias a su nuevo cargo. Se supone que el presidente Fernández será su marioneta.