Las salidas de Marcelino Fernández Verdes y de Ángel Muriel -su mano derecha-, y la incorporación de Eugenio Llorente han elevado la edad media del comité de dirección de ACS hasta los 72,6 años de edad, lo que no deja de ser bonito, instructivo y muy esperanzador para los mayores de 60 años que buscan trabajo, aunque no lo es tanto para los que confían en jubilarse antes de los 70.

Está claro que el presidente de ACS apuesta por carreras profesionales duraderas y que, de momento, no tiene en mente designar un sucesor al frente del grupo. Así, tal y como publica El Economista, el benjamín del comité de dirección es José Luis (Chitín) del Valle, que, con 71 años de edad, continúa ejerciendo de secretario general del Consejo de Administración de ACS. Le sigue de cerca (72 años) Ángel García Altozano, que trabaja en el grupo desde 1997.

Los siguientes en el escalafón son Florentino y el recién incorporado Eugenio Llorente, ambos con 74 años de edad. La de Llorente es la clásica trayectoria profesional de los más mayores, que desempeñaron toda su carrera en una misma compañía: Llorente comenzó en Cobra en el año 1973. Y sigue en el grupo.

Lo mismo se puede decir de Antonio García Ferrer que, con 76 años, se lleva el premio al más veterano. Y es que el actual vicepresidente ejecutivo de ACS inició su carrera profesional en Dragados y Construcciones en el lejano año de 1970. Un chaval.

El cese de Fernández Verdes como CEO del grupo tuvo un episodio memorable durante la última Junta de Accionistas, cuando Chitín del Valle le obligó a ratificar su intención de abandonar el cargo. Y todo bajo la indiferencia más absoluta de Florentino.