Sr. Director: No deja de ser curiosa la extrañeza que en muchos ámbitos ciudadanos, e incluso en la esfera política, causan ciertas actitudes y algunos comportamientos de quienes están cada día en los medios de comunicación. No se entiende muy bien por qué causa extrañeza que ediles que responden a ideologías perfectamente definidas, se nieguen a votar condenas para actitudes totalitarias o regímenes dictatoriales. Tampoco se justifica la extrañeza ante manifestaciones callejeras protagonizadas por quienes, desde siempre, han hecho de la barricada su hábitat natural. Es absurdo extrañarse de que un político mienta descaradamente y responda con la falsedad a las preguntas de un juez, que se interesa por negocios más bien sucios. A nadie debería de extrañar que las campañas propagandistas que se basan en el despilfarro, se nutran de fondos poco transparentes. ¿Será cosa de la condición humana? José Morales