Dicen que escribir es un oficio que se aprende escribiendo. Bueno, eso como todos. Pero pienso que el de escritor es el que más exige en este aspecto, porque además tiene una etapa previa que es la de lector, etapa que no acabará jamás. No conozco ni a un solo escritor que no haya sido y no sea un gran lector. Se dice también que muchos de los grandes escritores aseguran que leen cuatro a cinco veces más de lo que escriben.

Stephen King recomienda con contundencia que si quieres ser un gran escritor, debes hacer dos cosas: leer mucho y escribir mucho, y creo que en este caso el orden de los productos es imprescindible. El propio Gabriel García Márquez  dice que el escritor escribe su libro para aplicarse a sí mismo lo que no puede explicarse. Posiblemente, lo que "no puede explicarse" o lo que no puede encontrar en otros libros que lee, y esto ya lo digo yo. También nos encontramos con un Ernest Miller Hemingway, que dice que para un auténtico escritor cada libro debería ser algo en lo que intenta que está más allá de su alcance. Y es que ese "algo más allá de su alcance" es cualquier otro libro no escrito por él mismo o nosotros y que somos capaces de leer.

En el fondo, con la lectura de cada libro ajeno a nosotros mismos, nos introducimos en un mundo distinto al nuestro. Ese mundo que nos pude maravillar, admirar, o todo lo contrario, dejarnos totalmente impactados de forma contraria. Es de alguna manera lo que pondría en marcha el motor. Es lo que va a engrasar la máquina de nuestra capacidad creativa para escribir.

Tratar de introducirse en la escritura como algo "fácil" para alcanzar el éxito, me parece que es un mal camino

También es verdad que hay muchos escritores que se rinden. Lo hacen porque no han tenido éxito con su primer libro, ni con el segundo... ni con el cuarto. Yo soy de los que piensan que tratar de introducirse en la escritura como algo "fácil" para alcanzar el éxito, me parece que es un mal camino como inicio. Pienso que la escritura es algo que surge de nosotros independientemente del éxito obtenido. De hecho, Richard Bach dejó dicho que un escritor profesional es aquel amateur que nunca se dio por vencido.

Los escritores tenemos que escribir y tenemos que hacerlo mucho. Mi abuelo, Julio Pérez Torres, que no era escritor pero sí un gran lector y un magnífico pintor, al leer uno de mis primeros libros, me recomendó : Todos los días escribe, aunque sea poco, pero escribe. De alguna forma, hoy en día, tenemos la oportunidad de que este consejo se lleve a cabo, porque a falta de tiempo y hacer prosa sublime, en silencio y solos en casa, las nuevas tecnologías nos ofrecen una bancada gimnástica para nuestra devoción de escribir: cada mensaje de WhatsApp, cada tuit o los mails que escribimos por cualquier motivo, se han de convertir en un ejercicio de perfección, estudiando los signos de puntuación, cuidando la estructura o sabiendo que tenemos el espacio limitado para argumentar una idea...

Todos los días escribe, aunque sea poco, pero escribe. Eso fue lo que me recomendó mi abuelo 

Los autores que hoy presento, con los que tuve una entretenida charla, no solo hablando de libros y escritura, pero sí convergiendo al final en ello, en un programa de radio titulado Tomando café con..., verán que son perfiles de escritores muy diferentes. Que cada uno ha llegado al mundo de la escritura de forma totalmente diferente, en tiempo y forma. Los cito en orden de aparición:

Aceptamos bruja como amiga intima... (Librando Mundos) de Miriam Lavilla, tuvo un éxito bastante sonado con una serie de títulos publicados en Planeta. Ahora lo hace desde un pequeño sello. La han querido convertir en la autora española del chick-lit y eso la enfada, porque en ningún caso ha tenido interés en esa línea narrativa, a la que aborrece, y se defiende diciendo que solo escribe humor, sin más emparejamientos posibles.

Marea Libro 1 Cuando el corazón late (autoedición ebook) de Federico Correa Gil de Biedma. Este autor que se encontró de casualidad con la escritura llevado por unas circunstancias que cambiaron su vida, escribió esta primera novela y, sin demasiada fe, la colgó en Amazon, y ya son varios miles de ventas las que lleva desde que en 2012 la publicara. Después de esto, varias novelas negras, cuentos infantiles, premios literarios, etc. le han ido posicionando en el mercado de forma muy sólida.

Nadie entierra a los lobos (un libro en el bolsillo) de Rafael Díaz Riera. Después de una vida entera dedicada a la enseñanza como catedrático de instituto enseñando literatura, a la jubilación se descuelga con esta historia, su primera novela, de carácter histórico sobre los visigodos. De una notable narrativa de corte juvenil, tiene una carga de datos históricos muy importantes que tanto gusta al adolescente gustoso por las aventuras, como el adulto deseosos de conocer más, satisfacerá a ambos. Prepara otra novela, para después del verano, sobre la I Guerra Mundial.

@hptr2013