Cuarenta y tres años después de que lo hiciera la vecina Italia, la pequeña república de San Marino aprobó en referéndum, ayer domingo, la legalización del aborto, según resultados provisionales publicados por el Ministerio del Interior que recoge DW

Un 77% de los votantes de este pequeño país de fuerte tradición católica aprobó el aborto libre hasta las 12 semanas de embarazo y después, en caso de amenaza para la vida de la madre o de malformaciones detectadas en el feto, según los resultados, que abarcan 33 de los 37 colegios electorales. El referéndum de este domingo fue iniciativa de la Unión de Mujeres de San Marino. 

Junto con Malta, Andorra y el Vaticano, San Marino se contaba entre los últimos lugares de Europa con prohibición total del aborto, incluso en casos de violación o incesto, de graves daños al feto o de riesgo para la vida de la madre.

El aborto atenta contra la ley natural porque todo el mundo puede saber con su sola razón que matar a un niño en el vientre de su madre es un asesinato. Y la ley natural pide que ese niño siga viviendo.