Durante la pasada legislatura, Rubén Manso ejerció como portavoz parlamentario en materia económica del partido Vox. Con su salida y la de Iván Espinosa de los Monteros, se dijo que Vox había perdido su pata liberal. Y es cierto pero también perdió una de sus patas de inequívoca cosmovisión cristiana. 

En cualquier caso, Vox ha perdido la oportunidad de ser el único partido político con representación parlamentaria con un programa económico liberal. El único. Pues bien, ahora resulta que Rubén Manso ha sido elegido presidente del Centro Diego de Covarrubias, centro cristiano y liberal. Sustituye a Vicente Boceta. 

Y es que los hay que piensan que cristianismo y liberalismo económico -he dicho económico- que no capitalismo, sí son compatibles. Entre estos, figura el famoso canónigo de la Escuela de Salamanca, Diego de Covarrubias, que tanto habló del precio justo, de la dignidad de los indios americanos, hijos de Dios o que avanzó normas sobre lo que hoy conocemos como derecho internacional. Es decir, uno de los grandes mentores, junto a Francisco de Vitoria y Domingo de Soto, de una de las realizaciones históricas más logradas de España a lo largo de la historia: el flujo intelectual de la magistral Escuela de Salamanca.