Covite denuncia la convocatoria de homenajes a etarras, a los cuales iba a renunciar EH Bildu, pero ya se ve que no lo han hecho
El pasado 29 de noviembre, el Colectivo de Presas y Presos Políticos Vascos (EPPK) dijo que iban a a renunciar a hacer ‘ongi etorris’ a los presos de ETA a su salida de prisión.
Pues bien: el Colectivo de víctimas del terrorismo, COVITE, ha denunciado la convocatoria por parte del movimiento ‘Sare’ de una manifestación a celebrar este próximo viernes, día 31 de diciembre, en la localidad guipuzcoana de Arrasate-Mondragón, en apoyo a tres miembros de ETA. Covite ha alertado de que esta movilización, que se llevará a cabo a partir de las seis de la tarde, está organizada a favor de la "impunidad" de Henri Parot, 'Unai', condenado por 39 asesinatos, José Manuel Pagoaga Gallastegui, 'Peixoto', y Eugenio Barrutiabengoa, 'Arbe', prófugo de la justicia en Venezuela.
Además, Covite ha recordado que la semana pasada la izquierda abertzale "mostró su verdadera cara con cuatro hechos: lloraron la muerte del asesino Troitiño", con "aplausos al jefe etarra Mikel Antza", y con la incorporación del último jefe de organización terrorista ETA David Pla a la ejecutiva de Sortu.
Cabe recordar también que esta misma semana, las asociaciones de víctimas denunciaron el ongi etorri a Ignacio Martín Etxebarria, alias ‘Mortadelo’, en Pamplona. El etarra fue condenado por el asesinato de cinco militares en 1992, además del hijo de un coronel, recuerda OK Diario.
Pero el de «Mortadelo» no fue el único acto público de apoyo a miembros de la banda terrorista en Nochebuena. Familiares de presos de ETA rindieron homenaje también a algunos presos etarras en el Casco Viejo de Bilbao, recuerda La Razón.
También en Galdácano y Baracaldo pusieron mesas de celebración proetarra, algo que no es la primera vez que ocurre. En Bilbao no han cesado los homenajes. Hace menos de un mes colocaron una placa en honor a un etarra: Ricardo Gómez Goikoetxea «Ritxi». De hecho, el entorno proetarra conocen la plaza por este nombre y no por de la Plaza del Carmen, situada en el barrio Santutxu, añade La Razón.
Recordemos que EH-Bildu es la coalición en la que se integran los herederos de Batasuna, brazo político de ETA y que nunca ha condenado los asesinatos de la banda terrorista. En esa coalición está Sortu y también Eusko Alkartasuna (EA).
El pasado 18 de octubre, el coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, mostró "pesar y dolor por el sufrimiento padecido" por las víctimas de ETA, que, ha afirmado, "nunca debió haberse producido". "Queremos trasladarles nuestro pesar y dolor por el sufrimiento padecido. Sentimos su dolor y desde ese sentimiento sincero afirmamos que el mismo nunca debió haberse producido, a nadie puede satisfacer que todo aquello sucediera, ni que se hubiera prolongado tanto en el tiempo. Debíamos haber logrado llegar antes a Aiete".
Claro que, horas después, delante de los miembros de su partido, Otegi reconoció que el principal motivo que tienen para apoyar los Presupuestos de Pedro Sánchez es sacar a los presos de la banda terrorista ETA que quedan encerrados en las prisiones españolas. "Esos 200 tienen que salir de la cárcel. Y si para eso hay que votar los Presupuestos, pues lo votaremos. Así de alto y de claro os lo decimos".
Vamos, que el gesto de mostrar “pesar” —no pedir perdón— por las víctimas era una concesión al Gobierno de Pedro Sánchez para que no quedase tan mal el apoyo de los herederos de ETA a sus presupuestos... Vamos, para blanquear a EH-Bildu.
En este sentido, desde COVITE exigen a la izquierda abertzale no solo que cesen los ongi etorris, sino toda expresión de legitimación y justificación a ETA. “Que dejen de llamar presos políticos a los asesinos de nuestros familiares. Que dejen de exigir su impunidad en multitudinarias manifestaciones. Que saquen a ETA del espacio público, de las calles de todos y no hagan pintadas, pancartas, etc. de exaltación a ETA. Y que dejen de homenajear también a etarras fallecidos”, reclamó Consuelo Ordóñez, presidenta de COVITE.
Pero, por lo visto, los amigos de ETA no están haciendo caso a las víctimas y todo es un paripé interesado… mientras el Gobierno Sánchez mira hacia otro lado, y no es el de las víctimas.