Atención a lo ocurrido en EEUU, donde el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (ACOG, por sus siglas en inglés) prohibió participar en su conferencia anual de educación médica a ginecólogos que se oponen al aborto y defienden la vida, recoge Aciprensa.

Esta flagrante discriminación fue calificada por un grupo de congresistas estadounidenses como “hipócrita e indignante”. En concreto, por Chris Smith, de Nueva Jersey; Virginia Foxx, de Carolina del Norte; Chip Roy, de Texas; Diana Harshbarger, de Tennessee; y el Dr. Andy Harris, de Maryland.

Los congresistas difundieron un texto en el que denunciaban: “Los profesionales de la salud deberían ser bienvenidos para presentarse en una conferencia que está diseñada para educar a las siguientes generaciones de obstetras y ginecólogos”. “La ACOG no oculta su agenda abortista extrema”. “Los educadores médicos y los médicos en formación podrían haber aprendido, de la Asociación Americana de Ginecólogos y Obstetras Provida, sobre el tratamiento de ambos pacientes en un embarazo -la madre y el niño por nacer-, si la ACOG no hubiera temido que se dijera la verdad sobre el aborto”.

La presión de la ACOG para promover el aborto está totalmente en desacuerdo con los hechos médicos básicos y las opiniones de la mayoría de los profesionales de la salud estadounidenses, incluido el 93% de los ginecólogos y obstetras en la práctica privada que no realizan abortos

Los congresistas prosiguen: “Sus instrucciones detalladas de lobby a favor del aborto para los miembros de la ACOG, su ‘guía de lenguaje’ que promueve eufemismos que ocultan la realidad del aborto y su intención declarada de ´aumentar la disponibilidad de proveedores de aborto entrenados son sólo algunos ejemplos de su trabajo activo y deliberado para promover el aborto a pedido y difundir información errónea sobre el movimiento provida”.

La declaración denuncia, además, que “la presión de la ACOG para promover el aborto está totalmente en desacuerdo con los hechos médicos básicos y las opiniones de la mayoría de los profesionales de la salud estadounidenses, incluido el 93% de los ginecólogos y obstetras en la práctica privada que no realizan abortos”. “Matar deliberadamente a uno de los dos pacientes en un embarazo, a través del aborto electivo, no es cuidado de la salud”. “Como miembros del Congreso, pedimos a la ACOG que ponga fin a su discriminación contra los médicos provida”.

Y concluyen: “Presionaremos para que haya cambios inmediatos en esta conducta inaceptable, ya sea que eso signifique reprender a la ACOG en los encuentros o rechazar reuniones hasta que cambien de rumbo, y alentaremos a otros miembros a hacer lo mismo”, concluye el texto.