Desde la CAM señalan que la reunión con ANELE es una de las iniciativas que el Gobierno regional ha presentado este mes para denunciar algunos borradores de los volúmenes con los que los alumnos madrileños estudiarán
La Comunidad de Madrid ha trasladado a los editores de libros de texto su preocupación por los nuevos contenidos para el próximo curso.
El titular de la cartera autonómica de Educación ha señalado que este encuentro ha servido para poner en común aspectos entre las empresas que se encargan de redactar los textos de las diferentes materias y la Comunidad de Madrid, administración que en la actualidad está ultimando la aprobación de la parte del currículo que le corresponde.
El Ejecutivo madrileño ya ha adelantado recientemente que el servicio de Inspección Educativa revisará los nuevos textos a través de un plan especial, ya que su supervisión y la de otros materiales curriculares es competencia de las administraciones educativas, que deben velar por el respeto a los principios y valores de la Constitución y lo dispuesto en la ley estatal. A lo que desde ANALE (Asociación Nacional de Editores de Libros y Material de Enseñanza) ha respondido en un comunicado: "si la Inspección educativa, dentro del ejercicio técnico de sus atribuciones, detectara que algún libro o material incurre en alguna cuestión contraria a estos elementos fundamentales, somos los primeros en solicitar que se corrija".
En todo momento, Ossorio ha mostrado la “confianza en la profesionalidad de los editores de libros para que los ejemplares que vayan a comenzar a usar el próximo curso escolar los alumnos madrileños no reflejen ningún tipo de mensaje de adoctrinamiento y se adapten al rigor científico y sean adecuados a las edades de los alumnos y al currículo”. Además, ha destacado que “no se debe atribuir la responsabilidad a las editoriales, porque con un marco curricular adecuado no habrían publicado contenidos y competencias de esta naturaleza”. Precisamente, los editores responden así a este punto: "todas las editoriales a la hora de desarrollar sus proyectos tienen en consideración tres elementos fundamentales, en línea con lo que establece la Ley Orgánica de Educación (LOE) en su Disposición Adicional Cuarta. Han de plasmar en los libros y materiales educativos lo establecido en los diseños curriculares de los Reales Decretos de Enseñanzas Mínimas y en los Decretos autonómicos que los complementan. Este conjunto normativo es de obligado cumplimiento. Así ha sido siempre con todas las Leyes Educativas y así ha sido ahora también".
No obstante, desde ANELE recalcan que "Los libros de texto presentados en los últimos días en los Medios de Comunicación son prototipos que aún están sujetos a cambios. Se han elaborado tomando como referencia los desarrollos curriculares establecidos en los Reales Decretos de Enseñanzas Mínimas. Aún no incluyen los desarrollos curriculares autonómicos y, en aquellos casos en los que se ha podido avanzar con los borradores, esta inclusión es parcial".
Desde la CAM señalan que la reunión con ANELE es una de las iniciativas que el Gobierno regional ha presentado este mes para denunciar algunos borradores de los volúmenes con los que los alumnos madrileños estudiarán, a partir del mes de septiembre, y que se han conocido a través de los medios de comunicación, al igual que el anuncio de Isabel Díaz Ayuso de que el Ejecutivo autonómico recurrirá ante el Tribunal Supremo el Real Decreto del currículo de Bachillerato aprobado por el Ejecutivo central en el marco de la LOMLOE, al entender que faltan contenidos y que hay una elevada carga ideológica.