
Gemma Manzanero es una presentadora catalana que denunciaba en sus redes haber sufrido un robo violento por parte de dos marroquíes: les llamaba “hijos de la gran puta” y aseguraba estar “hasta el coño”.
Lo que ha sorprendido respecto a esta noticia es que Manzanero publicaba en su día unos tuits contra Vox, de cuyos votantes dijo: "la gente que vota a Vox no merece ningún respeto. Al fascismo no se le respeta".

Según recoge e-noticies, la diputada de Vox en el Parlament Júlia Calvet ha respondido a Manzanero. Ha recordado que “hace un tiempo decía que los votantes de Vox no merecíamos respeto por denunciar que la inmigración masiva e ilegal está afectando gravemente a nuestra seguridad. Solo por pedir que cualquier extranjero que delinca sea expulsado”.
La diputada ha mandado todo su apoyo a Gemma en nombre de Vox, “porque nadie debe pasar por esta situación”.
Ha añadido que “esta ya no es una excepción” sino que “empieza a ser la norma en todos los barrios de Cataluña”. Pero advierte que “no es casualidad”, recordando que “más del 50% de los presos en Cataluña son extranjeros, y más del 80% de los detenidos en Barcelona también”.
Por eso ha alegado que el discurso de Vox “no es racista” y que lo que quieren es “que cualquier mujer pueda pasear tranquilamente por su barrio sin tener que ser atracada, violada o agredida”.
Casos como el de Manzanero recuerdan a otros sucedidos en Cataluña, precisamente, por ejemplo, el de la ex dirigente podemita Gemma Galdón ante la okupación de una vivienda de su propiedad: "No tengo palabras".
O en Murcia, donde una concejal socialista, defensora de la inmigración, fue atacada por un magrebí al volver a casa: “No salgo a la calle con la tranquilidad que lo hacía antes. Ahora, miro todo y a todos. Tengo miedo, temor… Espero que poco a poco se me vaya pasando”.











