Comenzamos esta crónica semanal sobre cristianos perseguidos en Vietnam, donde el sacerdote dominico Joseph Tran Ngoc fue asesinado a puñaladas el sábado 29 de enero mientras impartía la Confesión en una iglesia en la ciudad de Dak Mot, ubicada en el municipio vietnamita de Kontum, recoge Aciprensa.

Este 30 de enero la Orden de Predicadores informó que el padre Joseph fue asesinado a puñaladas mientras confesaba el sábado por la tarde antes de celebrar la Misa. “Esta es la muerte más grave de un sacerdote después de la guerra”, afirma la Orden. Hasta el momento, no se sabe si el sacerdote fue atacado por un penitente, un feligrés o una tercera persona.

El P. Joseph, de 40 años, fue ordenado en agosto de 2018, luego fue enviado al trabajo misionero en la ciudad montañosa de Dak Mot. “Sirvió a la parroquia y cuidó fielmente del rebaño de Dios confiado a su cuidado pastoral”, escribió el sitio web de la Orden. “Encomendamos a nuestro hermano a la misericordia del Señor y a sus oraciones”, concluye la Orden en su comunicado.

William Siraj, de 75 años, “recibió múltiples disparos y murió instantáneamente en la emboscada

Un suceso similar tuvo lugar en Pakistán, cuando un grupo de hombres armados emboscaron y asesinaron a un clérigo cristiano e hirieron a otro cuando regresaban a su casa después de celebrar el culto dominical en la ciudad de Peshawar, recogió Aciprensa.

Associated Press (AP) informó este domingo 30 de enero que, según informes de la policía pakistaní, William Siraj, de 75 años, “recibió múltiples disparos y murió instantáneamente en la emboscada en el vecindario de Gulbahar, mientras que el sacerdote Naeem Patrick fue tratado brevemente en el hospital por una herida de bala en la mano”.

Un tercer clérigo resultó ileso al interior del automóvil que iba por la carretera de la circunvalación de Hayatabad, un suburbio de Peshawar. Hasta en este momento, ningún grupo ha asumido la responsabilidad de la emboscada. AP informó que la policía estaba revisando las imágenes de cámaras de seguridad para localizar a los atacantes, quienes habrían huido en motocicletas.

En Pakistán, más del  95% de habitantes son musulmanes y los cristianos son minoría. Es común que musulmanes extremistas ataquen a comunidades cristianas. Por ejemplo, están las detenciones forzosas, las acusaciones de blasfemia que son castigadas con pena de muerte, los secuestros, conversiones y matrimonios forzados de mujeres menores de edad, el ataque de iglesias, entre otros.

«Moriré pero no te dejaré entrar», le dijo al terrorista armado con explosivos

Un ejemplo de esta persecución a los cristianos en Pakistán se dio en 2015, cuando un terrorista suicida intentó entrar en una iglesia católica y Akash Bashir, un guardia de seguridad voluntario de 20 años, le impidió el paso, falleciendo a causa de la deflagración del terrorista. La Congregación para las Causas de los Santos acaba de anunciar a la archidiócesis de Lahore, que abrió su proceso de canonización por martirio en noviembre, que pasa a ser considerado como Siervo de Dios, recogió Infocatólica de CWR.

«Moriré pero no te dejaré entrar», le dijo al terrorista armado con explosivos. A continuación, el atacante hizo estallar una bomba, matándose inmediatamente y al hombre ahora reconocido como candidato a la canonización: Akash Bashir. Gracias a su acción, la iglesia -con más de 1.000 católicos dentro- se salvó de una explosión directa.

El grupo terrorista Tehreek-e-Taliban Pakistan Jamaatul Ahrar (TTP-JA) reivindicó posteriormente los atentados que causaron 17 muertos y más de 70 heridos, informó Vatican News.

Casi siete años después, el 31 de enero, el arzobispo de Lahore, Sebastian Shaw, anunció que el Vaticano aceptaba a Akash Bashir como Siervo de Dios, título que se otorga a un candidato a la santidad mientras se examina detenidamente su vida y su obra.

El padre Francis Gulzar, vicario general de la archidiócesis de Lahore, respondió calificándolo de «gran día para la Iglesia católica de Pakistán». «Ofreció su vida como sacrificio para salvar las vidas de la comunidad cristiana en la iglesia católica de San Juan», dijo el vicario general. «Es el primer cristiano pakistaní que ha sido elevado al rango de Siervo de Dios».

La cruz está recorriendo muchos lugares del mundo para aumentar los lazos de comunión con los cristianos perseguidos y la oración por ellos

Y, en España, el Colegio Juan Pablo II de Parla (Madrid) ha recibido la visita de una cruz proveniente de Irak, de un templo profanado, que está recorriendo muchos lugares del mundo para aumentar los lazos de comunión con los cristianos perseguidos y la oración por ellos.

Cruz Irak

En los vídeos a continuación puede encontrarse un testimonio luminoso y actual de fe: una niña iraquí refugiada que da testimonio de perdón a los perseguidores, y la confesión de fe de un mártir: un ministro pakistaní asesinado hace pocos años a causa de su fe.