![Ana Pardo de Vera denuncia a Vito Quiles por acoso: "Estamos hablando de una estrategia organizada que ya me ocurrió en otra ocasión [...] No van solos, va un cámara siempre" Ana Pardo de Vera denuncia a Vito Quiles por acoso: "Estamos hablando de una estrategia organizada que ya me ocurrió en otra ocasión [...] No van solos, va un cámara siempre"](https://www.hispanidad.com/uploads/s1/13/06/24/5/vera.jpeg)
Recordemos lo ocurrido tras preguntar Vito Quiles a Ana Pardo de Vera, por la imputación de su hermana Isabel, quien fuera secretaria de Estado de Transportes, por corrupción.
Según Pardo de Vera -quien denunciará a Quiles- ha declarado a Público que Quiles "no es un jovenzuelo con ínfulas de periodista que te hace preguntas", sino que forma parte de un entramado pseudoperiodístico. "Son estrategias organizadas de acoso sistemático, de invasión del espacio físico, te tocan, no te dejan caminar... Son estrategias de amedrentamiento y amenaza, de insultos, de manipulación del vídeo que graban… Y no van solos, llevan matones alrededor que te rodean", añadió la periodista.
Menuda película se ha montado Ana Pardo de Vera con lo de Vito Quiles:
— Pedro Otamendi (@PedroOtamendi) July 3, 2025
“Me toca con el micrófono, empiezan a salir de los bares presuntos guardaespaldas, sale mi matrícula del coche”.
Ni Steven Spielberg. 😂 pic.twitter.com/Tw30MknMvk
¿Y qué delitos me vas a imputar, Ana? ¿El delito grave de “formulación de pregunta crítica sobre corrupción a hermana de imputada”? Jajaja. https://t.co/fs6mjMwIbT
— Vito Quiles 🇪🇸 (@vitoquiles) July 3, 2025
"En un Estado democrático no debería permitirse esta violencia sostenida e, insisto, muy planificada y financiada; por cierto, por algunas instituciones que se dicen democráticas, en este caso, la Comunidad de Madrid", añadió Ana Pardo de Vera. Una vez más, la culpa es... de Ayuso.
Otra cosa es que los "acosados", como Pardo de Vera, el también periodista, Antonio Maestre o el del 'jarabe democrático', Pablo Iglesias, se defiendan del acoso que aseguran sufrir, llamando "gorilas" a los periodistas que les preguntan o rompiendo y arrojando sus micrófonos al suelo. Eso está dentro, sin duda, de la libertad de expresión y/o de reacción ante tales "acosos".