• El informe de la Comisión Europea sitúa la tasa de desempleo en el 25,5% este año y el 24% en 2015.
  • El Gobierno calculaba la pasada semana una tasa del 24,9% este año y del 23,3% el próximo.
  • Bruselas mejora en una décima la previsión de crecimiento este año (1,1%) y calcula que en 2015 será del 2,1%.
  • Sitúa en déficit este año en 5,6%, mejor que el 5,8% pactado, pero advierte que sin nuevo ajustes, se disparará al 6,1% en 2015, frente al 4,2% pactado.

Hay pocas esperanzas para un cambio en España en lo que más nos preocupa: el paro. Crecemos poco y, en cualquier caso, no lo suficiente, para que se invierta esa demoledora tendencia. Son, 'groso modo', las conclusiones del informe de previsiones, hecho público este lunes, de la Comisión Europea. Las filas en las oficinas del Inem (en la imagen), en suma, seguirán dando que hablar.

Bruselas ha revisado al alza (en una décima) su previsión de crecimiento para España en 2014, al 1,1%, y calcula que la tasa de paro no bajará del 24% en 2015 (el Gobierno calculaba un 23,3%). Economía situaba el aumento del PIB este año en el 1,2%. Respecto al déficit público, lo deja en el 5,6% del PIB este año, mejor que el 5,8% pactado con la UE, pero advierte de que si no se adoptan nuevos ajustes, volverá a dispararse hasta el 6,1% en 2015, frente al 4,2% pactado.

La previsión de crecimiento para España sitúa a nuestro país en línea con el promedio de la eurozona (1,2%) y superará ampliamente en 2015, con un PIB del 2,1%, a la media de los países del euro (1,7%). Para el conjunto de la Unión, la Comisión calcula un crecimiento del 1,6% este año y del 2% en 2015. Alemania será el país con más crecimiento, del 1,8% este año y del 2% en 2015. España supera tanto a Francia (1% y 1,5%, respectivamente), como Italia (0,6% y 1,2%).

El informe de la Comisión señala que "la suave recuperación económica en España ganará impulso en medio de una mejora de la confianza y una relajación adicional de las condiciones financieras, ya que la reducción de la prima de riesgo y las mejores condiciones de financiación para el Tesoro y los bancos están repercutiéndose gradualmente a los prestatarios finales".

También advierte de que "el crecimiento podría verse negativamente afectado si las economías emergentes, particularmente las de Hispanoamérica, se desaceleran más de lo previsto". Y añade que "podría haber una sorpresa positiva si las condiciones de financiación mejoran más rápido de lo previsto, ya que esto impulsaría la demanda doméstica".

Otros puntos que destaca el informe son la fortaleza de las exportaciones y el relevo de la demanda doméstica como motor de crecimiento. Explica el aumento del consumo gracias a la mejora del empleo y a la baja inflación. No obstante, el paro "se reducirá, pero seguirá siendo alto". Bruselas mejora levemente sus previsiones en este punto: se situará de media en el 25,5% este año (frente al 25,7% en su anterior previsión) y en el 24% en 2015 (frente al 24,6%). La previsión es peor que la del Gobierno la semana (24,9% y 23,3%, respectivamente).

La inflación seguirá muy baja (en el 0,1% de media este año y en el 0,8% en 2015) debido a la débil demanda y a la caída en los precios de la energía.

Mariano Tomás

mariano@hispanidad.com