Conclusiones: un 55% de lo encuestados considera que hay razones para una huelga pero sólo un 18% hará huelga, mientras el 67% asegura que desafiará a los sindicatos y acudirá a trabajar.
De ello podemos sacar varias conclusiones:
1. Los sindicatos consideran que la gente tiene miedo a perder su puesto de trabajo en tiempos de crisis, por lo que acudirá a su puesto.
2. El Gobierno asegura que esa disparidad demuestra que la oposición no ha colaborado con el Ejecutivo para salir de la crisis.
3. El PP está convencido de que la encuesta muestra el fracaso de la política económica del Gobierno.
Existen otras conclusiones probablemente más ecuánimes:
1. Hay motivos para estar desesperados, no para hacer una huelga, pues ésta no contribuye a crear empleo sino todo lo contrario.
2. La política económica de Zapatero es un desastre que nos ha llevado a los 4,6 (en puridad, cinco) millones de parados.
3. ¿Contra quién es la huelga? Contra el Gobierno o contra la oposición.
4. La reforma laboral que supuestamente ha provocado la crisis: ¿se pasa o se queda corta?
5. ¿Qué pretenden los sindicatos?
6. ¿Son esos mismos sindicatos los de la huelga general de junio?
Si hubiera sido encuestado yo también habría respondido que hay razones para una huelga general, pero también para unas elecciones anticipadas que echen a ZP de Moncloa. Pero Público no me preguntó.
En definitiva, lo que piensa el común de los españoles es: esto es un desastre pero no se arregla con una huelga general. Por tanto, el mayor fracaso es el de los convocantes.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com
