Al parecer, nada mejor que una OPA hostil para mejorar los cocientes de una compañía. El consejero delegado de Endesa, Rafael Miranda presentó en la mañana del miércoles ante los analistas un informe de situación de Endesa que cumple todos los objetivos marcados, a pesar del gran esfuerzo a la hora de dividendar, esfuerzo que ha marcado la política de la compañía desde que Gas Natural lanzara la OPA.

Pero la reunión con los analistas no marcó la sesión. Lo más llamativo fue la insistencia de Miranda en negar las acusaciones de información confidencial por la que Gas Natural le ha llevado, junto a E.ON, el Deustche Bank y otros bancos asesores, a los tribunales: Endesa no ha facilitado información privilegiada a nadie, insisto, a nadie No hemos hecho otra cosa que confirmar la información pública conocida por el mercado.

Miranda tiró de precedentes sobe la información facilitada, y citó casos similares como los de Barclays-Zaragozano, Parques Reunidos, OPA sobre Inmocaral, etc. El único problema es que todas esas operaciones eran amistosas, no hostiles.

Es más, para Miranda lo que ocurre es que Gas Natural nunca ha tenido voluntad de pedir su oferta y por eso no ha pedido información. Si la hubiera pedido se la habríamos dado. Desde la compañía catalana la respuesta llegó en minutos: Les habremos pedido información o menos de siete veces, pero nunca han respondido.