Lo primero que hacen lo inversores, cuando se materializa un cambio de Gobierno, es mirar la reacción de los mercados y con mucha más razón si el Ejecutivo de Coalición que se acaba de estrenar ha hecho saltar las alarmas en muchos sectores, entre ellos en el de las Socimis.

Pero han aguantado bien, sin apenas tambalearse en la bolsa española tras la investidura de Pedro Sánchez que está teniendo un impacto muy limitado en las cotizaciones de las mayores socimis y del mercado en general. La incertidumbre sobre los cambios en las reglas del juego jurídicas y fiscales del sector se ha concretado en un pequeño episodio de números rojos en el parqué. Las dos mayores socimis ha experimentado subidas significativas en 2019. Tanto Colonial como Merlin Properties. De cómo se han comportado sus acciones en este inicio de 2020 únicamente se desprende que los inversores han decidido tomarse un respiro.

Así que, con estas cartas sobre la mesa, las espadas siguen en alto a la espera de que el nuevo Gobierno adopte sus primeras decisiones más allá de la mera declaración de intenciones, intenciones que, no obstante, preocupan.

A pesar de no ser partidarios de un cambio en la regulación, las grandes socimis consideran que, en caso de realizarse modificaciones normativas, deberían diferenciarse los distintos tipos de socimis

Decía el jueves pasado, según han recogido algunos medios, el CEO de la socimi Merlin Properties, Ismael Clemente, en un foro empresarial en Madrid de tendencias inmobiliarias en 2020 organizado por PriceWaterhouseCoopers (PwC), que podemos tener algún problema en España si se prioriza ideología sobre economía. "Veo un fondo americano saliendo en 2020. He hablado con un inversor americano y me ha transmitido que cuando ve la hoz y el martillo, sale corriendo. El dinero tiene ideología".

Efectivamente, el dinero tiene ideología y ya sabemos que los norteamericanos tiene fobia a todo lo que huela a ‘rojo’. Sin embargo, debían reflexionar sobre el nuevo Pablo Iglesias que, como dice un gran comunicador,…”entre la revolución y la moqueta, Iglesias ha acabado escogiendo la moqueta”. Así que, igual el león no es tan fiero como lo pitan.

Recordemos no obstante, que Podemos ha visto en las Socimis un homólogo a las Sicavs que usar como cabeza de turco: "Hay que acabar con el privilegio de las Socimis, que tributan al 0%".

Una afirmación que no es exácta. Es cierto que las Socimis no tributan como tal. Sin embargo, las Socimis españolas están obligadas a repartir al menos un 80% de su beneficio vía dividendo, que tributa al 23%. De forma que pagan como mínimo un 18% del resultado, por encima del 15% que baraja imponer de tasa fiscal a las sociedades el Gobierno. Y no pueden comprar y vender inmuebles en plazos inferiores a tres años para no fomentar la especulación.

Desde el sector aseguran que lo mejor sería por parte de los políticos dejar a un lado la demagogia y enfrentarse al problema de los precios del alquiler haciendo más vivienda pública 

Pero por si acaso, las socimis están cambiando su estrategia de inversión. La vivienda sigue siendo su primer activo, pero ha perdido peso respecto a las oficinas y los centros comerciales. Aseguran los expertos que esto se está produciendo desde que entró en vigor la reforma del mercado del alquiler, acometida por José Luis Ábalos, que amplía la duración de los contratos a 5 años en el caso de propietarios particulares y a 7 años si el casero es una empresa. Como son las propias socimis. O los fondos de inversión.

Pero no solo son oficinas y centros comerciales los que están en su punto de mira porque las sociedades cotizadas sopesan la posibilidad de "reorientar inversiones" hacia la venta de las viviendas ante una más que probable transformaciòn de las reglas político-legales que complican el negocio de los arrendamientos. 

Desde el sector aseguran que lo mejor sería por parte de los políticos dejar a un lado la demagogia y enfrentarse al problema de los precios del alquiler haciendo más vivienda pública, más VPO.

En España, en comparación a otros países europeos como Alemania o Austria, hay muy poca vivienda pública y sin embargo, se quejan, el populismo apunta hacia los fondos y socimis, que apenas suponen el 6% del mercado del alquiler.  Aseguran que cuanto más crezca la posibilidad de una intervención en el mercado, más papeletas hay de que se retire oferta. En cualquier caso, lo que parecen tener claro es que una regulación que ponga tope a los precios del alquiler no hará que éstos se abaraten, además, se corre el peligro de incentivar la economía sumergida.

Las espadas siguen en alto a la espera de que el nuevo Gobierno adopte sus primeras decisiones más allá de la mera declaración de intenciones

El sector insiste además en que no se pueden comparar el mercado viviendas en alquiler social que hay en España y que no llega al 2% del total frente al 16% de Alemania y el 21% de Austria.

En este sentido, el CEO de Merlin Properties se ha referido a la Sareb, Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria, conocida como 'banco malo', para opinar que debería comprarla el Estado y poner sus activos en el mercado del alquiler…  "Hay una leyenda urbana que dice que la Sareb tiene activos en sitios que nadie quiere. Eso no es verdad, tiene activos en todas las zonas y la mayoría en lugares tensionados donde el alquiler ha subido de forma artificial".

A pesar de no ser partidarios de un cambio en la regulación, las grandes socimis consideran que en caso de realizarse modificaciones normativas deberían diferenciarse los distintos tipos de socimis. "Yo no creo que haya que reducir el número de socimis ni que haya que tocar la legislación, pero si van a hacerlo, que se haga con sentido y criterio".