En un mundo donde las monedas se devalúan y la mayoría de los bancos centrales imprimen dinero para comprar deuda pública, Suiza hace algo radicalmente distinto: invierte en acciones de las mejores empresas del mundo. Hoy su banco central es uno de los mayores accionistas de Wall Street, multiplicando su influencia y haciéndose de oro por el camino. ¿Qué riesgos supone que un banco central tenga tanta exposición a las Big Tech? ¿es este el modelo del futuro o una burbuja silenciosa?

En este nuevo vídeo de Si Lo Hubiera Sabido te contamos todo lo que está pasando con este metal.

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