“Dicho de una persona entrada en años, de edad avanzada”, así define mayor el diccionario de la Real Academia Española (RAE), y “dicho de una persona de mucha edad” la palabra anciano, pero estos términos son y suponen mucho más que eso. Se trata de personas con igual dignidad y derechos que el resto, con grandes dosis de experiencia, sabiduría y conocimiento de la vida a sus espaldas, que merecen ser respetadas y tenidas en cuenta.

Hace algo más de dos años, el papa Francisco quiso darles un reconocimiento especial creando la Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores, porque “son a menudo olvidados y nosotros olvidamos esta riqueza de custodiar las raíces y transmitirlas. El Santo Padre refirió que “los ancianos nos recuerdan que la vejez es un don y que los abuelos son el eslabón entre generaciones, para transmitir a los jóvenes la experiencia de la vida y la fe”. Dicha Jornada se celebra cada año y en su primera edición, la de 2021, bajo el lema ‘Yo estoy contigo todos los días’, el Papa dijo a los mayores: “Quiero decirte que eres necesario para construir, en fraternidad y amistad social, el mundo de mañana: el mundo en el que viviremos cuando la tormenta se haya calmado”.

El Santo Padre consideró que la ancianidad “no es una estación fácil de comprender”, porque “a pesar de que llega después de un largo camino, ninguno nos ha preparado para afrontarla, y casi parece que nos tomara por sorpresa

El papa Francisco con mayores y abuelos

 

La segunda edición de esa Jornada ha tenido lugar este año bajo el lema ‘En la vejez seguirán dando fruto’. “La ancianidad a muchos les da miedo, la consideran una especie de enfermedad con la que es mejor no entrar en contacto. Los ancianos no nos conciernen -piensan- y es mejor que estén lo más lejos posible, quizá juntos entre ellos, en instalaciones donde los cuiden y que nos eviten tener que hacernos cargo de sus preocupaciones”, señaló el Papa. “Es la “cultura del descarte”, esa mentalidad que, mientras nos hace sentir diferentes de los más débiles y ajenos a sus fragilidades, autoriza a imaginar caminos separados entre nosotros y ellos”, destacó.

El Santo Padre consideró que la ancianidad “no es una estación fácil de comprender”, porque “a pesar de que llega después de un largo camino, ninguno nos ha preparado para afrontarla, y casi parece que nos tomara por sorpresa. Envejecer no implica solamente el deterioro natural del cuerpo o el ineludible pasar del tiempo, sino el don de una larga vida”, subrayó. Asimismo, para el Papa “no es un tiempo inútil en el que nos hacemos a un lado, abandonando los remos en la barca, sino una estación para seguir dando frutos”, pues “tenemos una gran responsabilidad: la de enseñar a las mujeres y a los hombres de nuestro tiempo a ver a los demás con la misma mirada comprensiva y tierna que dirigimos a nuestros nietos. Hemos afinado nuestra humanidad haciéndonos cargo de los demás, y hoy podemos ser maestros de una forma de vivir pacífica y atenta con los más débiles. Estamos llamados a ser artífices de la revolución de la ternura”, añadió.

Para el Papa, la vejez “no es un tiempo inútil”, sino “una estación para seguir dando frutos”, pues “podemos ser maestros de una forma de vivir pacífica y atenta con los más débiles. Estamos llamados a ser artífices de la revolución de la ternura”

apoyo a los mayores

 

En 1990, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 1 de octubre Día Internacional de las Personas de Edad o Personas Mayores. Con motivo de esta conmemoración, el año pasado, Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, defendió que “el cuidado no sólo debe ser de alta calidad, sino asequible y accesible”, anunciando una nueva estrategia europea de asistencia y la puesta en marcha de una iniciativa europea sobre cuidados de larga duración, porque “la longevidad no es sólo cosa de los mayores, se trata de todos nosotros”.

Unas palabras que pronunció en la conferencia organizada por la Senior International Health Association (SIHA), donde se refirió que la baja adherencia a la terapia en Europa al situarse en torno al 50%, que es un problema en los mayores de 65 años, y que causa unas 200.000 muertes evitables y unos costes sanitarios de entre los 80.000 y los 125.000 millones de euros. Roberto Messina, presidente de la SIHA, refirió también el impacto del Covid y que la pandemia ha provocado, además de muertes, otros graves problemas: la suspensión de los cuidados ordinarios y el debilitamiento de la relación con los médicos con la consiguiente disminución de la adherencia a la terapia.

En la conferencia organizada por la Senior International Health Association (SIHA), se refirió que la baja adherencia a la terapia en Europa es del 50% y es un problema en los mayores de 65 años: causa unas 200.000 muertes evitables y unos costes sanitarios de entre 80.000 y 125.000 millones 

FIATC Seguros ha referido que la senectud (también denominada vejez o ancianidad) es el periodo de la vida humana que sigue a la madurez y generalmente comienza a partir de los 65 años, y es mucho más largo hoy en día que hace unas décadas. Se suele asociar con la última etapa de la vida y con problemas de salud, así como cambios físicos y mentales, pero es una fase más de nuestra existencia que se puede disfrutar.

Esta aseguradora ofrece una serie de consejos para disfrutar de esta nueva etapa de la vida. Primero, seguir una dieta saludable, evitando grasas y azúcares, con más cantidad de frutas y verduras frescas. Segundo, salir a pasear todos los días por los beneficios de caminar y también por lo que implica de relacionarse con otras personas. Tercero, practicar alguna otra actividad física ligera. Y cuarto, ejercitar el cerebro, que es tan importante como el cuerpo, mediante lecturas, películas, música, juegos de cartas o cursos que entrenen la memoria.

FIATC Seguros aconseja seguir una dieta saludable, salir a pasear todos los días, practicar alguna otra actividad física ligera y ejercitar el cerebro

personas mayores

 

Entre los organismos y entidades sin ánimo de lucro y empresas que brindan su apoyo a mayores se encuentra Sermade, una clínica odontológica móvil especializada en atención bucodental de calidad a personas que viven en residencias con necesidades especiales o dificultades de acceso a los servicios convencionales. Cuenta con dos unidades móviles totalmente equipadas y autorizadas por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, y que tienen su correspondiente registro sanitario. Sermade patrocina el Premio SENDA Salud y Bienestar, que en su última edición ha recaído en Sanitas Mayores por su modelo de cuidado con cero sujeciones físicas y la racionalización del uso de psicofármacos. La directora de Sermade, Sara Guisado, refirió “sabemos que no es fácil alcanzar las cero sujeciones físicas y la racionalización del uso de psicofármacos, pero muchos son los beneficios, sobre todo en la mejora de la socialización y el estado físico de las personas mayores de los centros residenciales”, destacando que también contribuyen a respetar los derechos de estas personas.

Los Premios SENDA reconocen la labor de instituciones, empresas y profesionales que trabajan por mejorar la calidad de vida de las personas mayores y/o en situación de dependencia, y “suponen también una excelente oportunidad de conocer diferentes proyectos que se están llevando a cabo para mejorar la atención sociosanitaria e intercambiar experiencias para continuar aprendiendo”, subrayó Guisado. Con las unidades móviles, Sermade tiene el objetivo de que “las personas mayores recuperen la capacidad de masticar y, de esta manera, mejore su nutrición y puedan disfrutar de cada comida. Todo ello, además, mejora su autonomía y autoestima”, destacó. Además, añadió que “una adecuada higiene de dientes y encías de las personas mayores evita complicaciones que, a corto y medio plazo, pueden comprometer su bienestar y calidad de vida”.

Sermade es una clínica odontológica móvil que tiene el objetivo de que “las personas mayores recuperen la capacidad de masticar y, de esta manera, mejore su nutrición y puedan disfrutar de cada comida. Todo ello, además, mejora su autonomía y autoestima”

anciana con auriculares y tablet

 

Y en la atención a los mayores también ha entrado la tecnología. Ever Health, empresa de servicios médicos tecnológicos, y la start up Bleta han firmado un acuerdo de colaboración para integrar los servicios de salud digital y teleasistencia en los dispositivos diseñados y programados por Bleta con el fin de dar más accesibilidad a los mayores y romper barreras.

Este paso supone un cambio en la forma de hacer las cosas y contribuye a la plena inclusión y participación de las personas mayores y, especialmente, de las que necesitan ayuda y acompañamiento en su andadura digital, junto con las que, además, necesitan algún tipo de asistencia en su vida. Y es que sólo un 31,8% de las personas mayores de 74 años ha usado Internet entre abril y junio, lo que supone 1,4 millones, según datos de una encuesta sobre Equipamiento y Uso de Tecnologías de Información y Comunicación en los Hogares, realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Un porcentaje que sigue siendo pequeño, aunque es algo superior al de años anteriores (23,4% en 2019 y 27,9% en 2020), además destaca el aumento del uso de aplicaciones de comunicación tipo WhatsApp, tanto a través de mensajes como para llamadas y videollamadas, y también se incrementa la lectura de prensa y revistas de actualidad online.

Sólo un 31,8% de las personas mayores de 74 años ha usado Internet entre abril y junio, lo que supone 1,4 millones. Un porcentaje que sigue siendo pequeño, aunque es algo superior al de años anteriores (23,4% en 2019 y 27,9% en 2020)

tablet de Bleta y accesorios

 

Bleta ha creado una tablet para personas que necesitan una pequeña adaptación y facilidades para convivir con las nuevas herramientas y canales digitales. Esta idea surgió durante la pandemia, en las semanas más duras de la primera oleada, al detectar muchas necesidades no cubiertas y que cientos de personas mayores ingresadas y aisladas no contaban con herramientas y dispositivos para comunicarse o entretenerse. A través de la iniciativa #Acércales, se donaron más de 600 tablets, smartphones y accesorios para que los centros los pusieran a disposición de los mayores, y ahí detectaron que estos dispostivos eran difíciles de usar, así surgió Bleta para romper dichas barreras digitales. “Por increíble que parezca no se ha reparado en el detalle de ponerse en los pies de las personas mayores, los principales dispositivos tecnológicos han sido diseñados para los públicos mayoritarios”, ha afirmado Gerard Pinar, director de operaciones en Bleta.

Ever Health ha trabajado desde hace varios en residencias y servicios de asistencia a domicilio, así como en proyectos de adaptación de las plataformas, para hacer “que la tecnología pase desapercibida y sea un mero medio para que profesionales sanitarios y pacientes puedan estar en contacto y cubrir sus necesidades”, señaló su CEO, Rafael García. “Queremos que el protagonismo lo tengan médicos y pacientes, para que logren mejorar su calidad de vida. Es justo y nuestro deber hacer que los mayores hoy también disfruten de las ventajas de la tecnología como lo hacemos las nuevas generaciones y todos aquellos que hoy nacen y conviven de manera natural con la tecnología”, subrayó. Ever Health apuesta por hacer más accesibles los servicios de salud a través de la tecnología: en 2019, lanzó la posibilidad de poder realizar una consulta, sin altas, sin descargar ninguna aplicación y mediante un solo clic; desde 2021, hizo cambios con tecnología de video e integraciones avanzadas y diseñadas por médicos para realizar una videoconsulta con las máximas prestaciones. Ahora se ha unido a Bleta, que ha diseñado una tablet de uso sencillo, con tamaños de botones y de la letra adaptados y otras configuraciones extra para acomodar posibles dificultades visuales, auditivas, cognitivas y físicas de las personas mayores.

Unos ejemplos que merecen conocerse e imitarse por muchas otras entidades sin ánimo de lucro, organizaciones y empresas, extendiéndose a otros muchos sectores y no sólo el asistencial y el sanitario.