El líder de Nueva Democracia Mitsotakis ha declarado: “Grecia necesita un gobierno que crea en las reformas, no ocurrirá con un gobierno frágil”.
Grecia acudió ayer de nuevo a las urnas, tras las elecciones celebradas hace un mes en las que nadie se hizo con la mayoría necesaria para poder gobernar. Según la legislación griega, el actual primer ministro Kyriakos Mitsotakis pudo decidir no buscar ningún pacto y repetir los comicios en busca de un gobierno propio, sin coaliciones, como el que tenía en la anterior legislatura.
Pues bien: es lo que ha vuelto a conseguir Mitsotakis (Nueva Democracia), tras imponerse en las elecciones de ayer y lograr la mayoría absoluta, con el 40,56% de los votos y 157 escaños de un total de 300. Eso sí: Mitsotakis se ha beneficiado de los 50 escaños adicionales que el sistema electoral griego otorga a la fuerza ganadora, en un parlamento de 300 diputados.
En segundo lugar ha quedado la Coalición de la Izquierda Radical (SYRIZA, 17,83% y 47 escaños), mientras que el histórico Partido Socialista Panhelénico (PASOK, 11,86%, 32 asientos) se queda el tercero.
"Hoy se cierra definitivamente un ciclo traumático de mentiras y toxicidad que frenaba a Grecia", dijo Mitsotakis en alusión al declive de Syriza.
Por su parte, el líder de Syriza, Alexis Tsipras, ha anunciado un proceso de "reconstrucción" tras la clara derrota sufrida en las elecciones. "No hace falta ni decir que en este proceso de reconstrucción (de SYRIZA) yo seré el primero en someterme al juicio de los afiliados", ha afirmado Tsipras en su primera comparecencia tras conocerse los resultados oficiales, recogida por la televisión pública griega.