En Finlandia, ha habido eleciones generales en las que el vencedor, por escaso margen, ha sido el derechista Partido Coalición Nacional (Kokoomus) de Petteri Orpo, con un 20,8% de los votos, que ha logrado 48 de 200 escaños. 

A sólo siete décimas (20,1%), el segundo ha sido el también derechista Perussuomalaiset (Partido de los Finlandeses), que pasa de 39 a 46 escaños. Este partido ha sido calificado como ultraderechista por el bloque de izquierdas.

Según Wikipedia, Perussuomalaiset (Partido de los Finlandeses) es crítico con la inmigración --pretende reducir la inmigración de países en desarrollo fuera de la UE-- y con la Unión Europea, a la que ve como un proyecto innecesario que va en contra de la autonomía política de Finlandia y una usurpación del gobierno. Y ha denunciado enérgicamente el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático, firmado en diciembre de 2015, por considerarlo "catastrófico" para la economía. Su líder, Riikka Purra, apuntó: "No hay nada que esconder, avergonzarse u oscurecer nuestros valores. Somos un partido nacionalista y patriótico: defendemos Finlandia y lo finlandés". 

En tercer lugar se sitúa el Partido Socialdemócrata de Finlandia, encabezado por la actual primera ministra de Finlandia, Sanna Marin, que obtiene un 19,9% de los votos y 43 escaños. Marin se ha ofrecido a Orpo para entrar en una coalición de Gobierno.  

En cuarta posición con un 11,3% de los votos y 23 escaños se sitúa el Partido del Centro de Finlandia (PCF). Los Verdes con 13 y la Alianza de Izquierda se queda con 11 representantes, mientras que el PCDF logra nueve asientos; el PPF, cinco y el Movimiento Ahora, uno. 

Como se recordará, Marin --amiga de Pedro Sánchez-- protagonizó algunos escándalos en su país tras filtrarse vídeos e imágenes de la primera ministra de fiesta con varios amigos. 

Lo más probable ahora es que Orpo tenga que formar una coalición de varios partidos para obtener la mayoría en el parlamento.