Liberales en Europa encuentro a pocos. Católicos hay más, pero ninguneados por la izquierda y la derecha
Hay que reconocer que Pedro Sánchez es un genio de la propaganda. Las grandes agencias de comunicación estudiarán su éxito comunicativo con el espantajo ultra, ahora convertido en 'internacional ultra'. El presidente del Gobierno ha conseguido que todo aquel que se atreva a discrepar de él se convierta, de inmediato en ultraderechista o filofascista. Le gusta más el término ultra que el de fascista, es más cómodo como insulto, porque lo cierto es que lo de 'ultra' sencillamente no dice nada.
Y no nos engañemos: ante las elecciones del 6-9 de junio, lo cierto es que el espantajo ultra cunde en toda Europa: ¡ Amigo Sánchez, eres un genio!
Los antiguos democristianos, hoy progres moderados, partidarios del mercado regulado, y los socialistas, hoy progres enloquecidos, pretenden mantener el histórico bipartidismo europeo... que no sería malo, si ambos no hubieran degenerado en trashumanismo 'woke'
Por contra, liberales en Europa encuentro a pocos y casi todos ellos confunden liberalismo con capitalismo. Vamos que les interesa más la empresa privada que la propiedad privada. Católicos hay más, pero ninguneados por la izquierda y la derecha. Por la izquierda porque saben que en el credo cristiano está su enemigo directo. En la derecha porque hace tiempo que dejaron de creer en Cristo, los primeros, los democristianos, y la nueva derecha sobre todo en Alemania y Francia no quiere tener nada que ver con Cristo y se dedica a adorar, como unos nacionalistas cualqueiZra a la patria.
Por su parte, los antiguos democristianos, hoy progres moderados, partidarios del mercado regulado, y los socialistas, hoy progres enloquecidos, pretenden mantener el histórico bipartidismo europeo... que no sería malo, si ambos no hubieran degenerado en trashumanismo 'woke'.
¿Estamos ante la última oportunidad de Europa para volver al cristianismo? No, nunca es la última, e incluso el 9-J puede suponer el entierro de las ideologías -la última, la ideología verde- y provocar la resurrección de la Europa cristiana.
Como ocurre en España con PSOE y PP, cabría preguntar a democristianos y socialdemócratas europeos en qué creen exactamente... para concluir que sólo creen en contravalores. Por ejemplo, en el derecho al aborto. Es decir, derecho de una madre a matar a su propio hijo en sus propias entrañas. Sí, en eso creen.
Entonces, ¿estamos ante la última oportunidad de Europa para volver al cristianismo? No, nunca es la última, e incluso el 9-J puede suponer el entierro de las ideologías -la última, la ideología verde- y provocar la resurrección de la Europa cristiana.
Que todo podría ocurrir.
