No nos cansamos de decirlo. Si la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, alias 'Antoñita la fantástica', más conocida como Yoli, no existiera, habría que inventarla. Vamos con la noticia: Sumar, la coalición de la que es lideresa, ha propuesto a Sánchez un impuesto para gravar el 25% del precio total de la venta de la vivienda para poner fin al "acaparamiento" inmobiliario, ampliando el mercado para jóvenes y familias vulnerables.
La medida especifica que el propietario deberá esperar al menos 730 días para vender su vivienda desde que la compró, sino le será impuesta la tasa, aunque contempla excepciones, y es que si la venta es en menos de dos años pero por motivos de necesidad de accesibilidad universal, enfermedad o modificación de la unidad de convivencia, se podrán librar.
Sumar ha elegido presentar su medida mediante una proposición no de ley (PNL) y ponen en el centro de la misma ese acaparamiento y el fenómeno conocido como flipping inmobiliario; una estrategia de inversión que consiste en la compra por debajo del valor de mercado, lo que Sumar es una "práctica especulativa" porque se revenden por un precio más elevado. Para Yoli, esto "no sólo hurta a la vivienda su función social, sino que, al especular con ella, contribuye al encarecimiento de su precio, haciendo más inaccesible un bien de primera necesidad para la mayoría social".
La formación también carga contra influencers, coach y gurús que hacen creer a los jóvenes que pueden hacerse ricos sólo disponiendo de capital para poder especular, ocultando "el sufrimiento que ocasionan a la mayoría especulando con un derecho como la vivienda".
Y es que para los de Sumar, la herencia inmobiliaria en España representa "más del 77% de la desigualdad", "una brecha que, en los próximos años, con la ‘gran sucesión’ a una parte de los millenials será mucho mayor".
Es por todos conocido y consenso del mercado el fracaso que ha supusto Sánchez y su Gobierno en materia de vivienda, lejos de ver el fallo, tanto socialistas como comunistas insisten en su error, ahora queriedo gravar, aún más, el acceso a una vivienda... esto marcha.
