El próximo jueves 20 de noviembre se cumplirán 50 años de la muerte de Franco. Menuda semanita nos espera. Bueno, las mentiras ya empezaron el mismo día de difuntos, siguió con la Resignificación del Valle de los Caídos, donde prosigue la profanación de cadáveres y de la Basílica, delante de la cual van a perpetrar un museo para reescribir la historia y donde no han conseguido derribar la cruz de Cristo porque no pueden, que si pudieran...
Ahora preparan el documental "El País de las 6.000 fosas", donde los pérfidos franquistas mataron y enterraron a miles y miles de sanos demócratas republicanos, todo ellos inocentes. Pues bien, todo es una gran mentira de la propaganda monclovita que, eso sí, revivirá el guerracivilismo de 1936 en 2025.
Vamos a ver si nos entendemos: la guerra civil fue cruel y ambos bandos cometieron crueldades. Ahora bien, no hay un recuento de los asesinatos -ejecuciones extrajudiciales- de ambos bandos, pero lo que está claro, clarísimo, es que las barbaridades perpetradas por los republicanos (socialistas, comunistas, anarquistas y masones) superaron con creces a las de los franquistas.
Ahora bien, no estamos ante un recuento realizado con buenas intenciones: estamos ante el 'show' sanchista del 20-N. Y es que Sánchez reescribe la historia. En una España había checas, lugares de tortura, vejación y asesinatos. En la España franquista no había checas.
Los nacionales cometieron algunos asesinatos a partir de 1936, los republicanos llevaban cometiendo muchos más desde 1931. Nada de reacción popular ante el golpe de Estado,
Fueron ellos lo que empezaron, ya en mayo de 1932 ardían los conventos en Madrid y comenzaban los asesinatos de curas, luego de católicos laicos, luego de militares, luego de derechistas... luego de todos los que me caían gordos o a los que tenía envidia.
Y algo más: el bando republicano fue el especialista en ejecuciones extrajudiciales. Lo de Primo de Rivera fue una excepción. Lo que se llevaba entre los milicianos era asesinar al margen de cualquier control judicial.
Por contra, nada más acabar la guerra, el Franquismo instituyó los tribunales. Sí, seguramente cometieron más de una injusticia pero al menos eras juzgado, no asesinado, en tu casa o en la checa.
Quiero decir que las penas de muerte de los franquistas pasaron por un tribunal. En las checas no había tribunales, sólo tortura y asesinatos.
Es la gran mentira del Sanchismo que, además, no servirá para mucho: la mentira tiene las patas cortas. Encima, sobre algún episodio de crueldad máxima que los españoles de tres generaciones más tarde habían olvidado... hasta que vinieron los insensatos de Zapatero y Sánchez a recordarlo bajo el pomposo, y mentiroso, nombre de memoria democrática.













