Stephen Hahn fichó por Flagship Pioneering, la empresa de capital riesgo que lanzó Moderna hace una década, a mediados del pasado junio. Conviene destacar que su nuevo puesto de trabajo le llegó seis meses después de haber aprobado la vacuna de Moderna. ¡Qué curioso! Parece un buen premio.

El pasado diciembre, Hahn era el comisionado de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) estadounidense y fue el encargado de dar el ‘ok’ a la vacuna de Moderna contra el Covid. Eso sí, un mes después renunció al puesto cuando se produjo la toma de posesión de Joe Biden como presidente de EEUU… Algo que no fue de extrañar, porque había sido elegido para la FDA por Donald Trump en diciembre de 2019. Y seis meses después, aterrizó en Flagship Pioneering, que es dueña de 20 millones de acciones de Moderna. ¡Olé!

Ojo, porque Hahn no es el primer exfuncionario de la FDA que después acaba en un laboratorio de una farmacéutica o de una biotecnológica, etc. Vaya puertas giratorias