El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá
Lo de José Luis Escrivá es pura demagogia. Cuando Hispanidad le preguntó en enero si el Gobierno se planteaba ayudas a la maternidad -para que nadie se quede atrás, y eso- el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones respondió con el Ingreso Mínimo Vital (IMV), la conciliación y el complemento a la pensión a partir del primer hijo.
Es decir, el Gobierno de Pedro Sánchez se ha cargado la escasa ayuda que había en España a la natalidad y que se reducía a 100 euros mensuales por hijo, hasta los tres años de edad. Una ridiculez que no daba ni para pañales, pero era una ayuda. Ahora -que nadie se quede atrás- la suprimen con la excusa del IMV, como si tuviera mucho que ver y retrasando esa supuesta ayuda a la jubilación de la madre o padre. Justo cuando los hijos ya son mayores y los padres no necesitan esa ayuda. Genial.
Pero es que, además, Escrivá aprovecha para recortar el complemento de la pensión por hijo hasta en un 73%, según el ABC, de tal manera que la supuesta ayuda a la natalidad castigará a las madres con dos o más hijos y con una jubilación de 15.500 euros anuales o más. Con Fátima Báñez, el complemento por hijo en la jubilación se acercaba a los 6.000 euros anuales; con Escrivá se reduce hasta 1.512 euros.
Sea como fuere, estamos hablando de complementos a la pensión y en ningún caso de ayudas a la natalidad o a la maternidad. Llamarlo así es pura demagogia.