Sr. Director:Tras las elecciones del 20D queda claro que la sociedad española está fragmentada y que la cuestión territorial es una de las claves para comprender este estado.La sociedad catalana también vive esta fragmentación. Podemos se ha alzado con el triunfo en una Comunidad Autónoma en la que los independentistas de Junts pel Sí y los antisistema de la CUP no acaban de ponerse de acuerdo para investir a Artur Mas.Por eso Mas ha llegado a ofrecerle a la CUP un Presidente de transición y 270 millones de euros para un plan social que deberá pagar el Estado, o lo que es lo mismo, todos los españoles.Con toda seguridad el partido de Artur Mas no quiere elecciones porque sabe que las perdería de manera rotunda. Consciente de que el Gobierno de España será de formación difícil, pretende ganar tiempo para adaptarse a lo que suceda en Madrid. Pienso que en esas estamos.Xus Madrid