El poder del prejuicio. Así se suicida Occidente
Una imagen vale más que 1.000 palabras y un chiste inteligente vale por 1.000 imágenes. Además, lo explica todo más rápido.
Viñeta 'ambientada' en Estados Unidos pero válida para cualquier zona de Occidente. Decía Einstein que es más difícil perder el átomo que romper un prejuicio. Este es el prejuicio, prejuicio sobre nuestra propia cosmovisión cristiana. Y así nos las dan, no en la otra mejilla, sino, de entrada, en las dos mejillas, lo que sin duda excede el mandato evangélico, como excede el otro mandamiento, el de la tradición, que aconseja odiar el pecado sin dejar de amar al pecador.
Para los que no hemos pasado del español y el argentino, abajo tenemos la traducción.
(La mujer lleva una camiseta del Partido Demócrata de EEUU).
- Yo no creo que las mujeres tengan derechos y creo que los homosexuales deben ser colgados.
- Wow. Eres un auténtico primitivo. Debes ser del Partido Republicano.
- No, en realidad soy musulmán y estas son mis creencias religiosas.
- Oh, por favor, perdóname. Espero que no pienses que soy una islamófoba.
Hispanidad
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