Insisto: no somos conscientes de la barbaridad que se vive en Estado Unidos: un verdadero golpe de Estado civil, con un capitán visible, muy visible, el capitán Obama, y un jefe invisible: la masonería internacional.En Washington, protestan contra el nuevo presidente salido de las urnas. Observen quiénes se manifiestan -cito a un canal de TV español horas antes de que Donald Trump (en la imagen) tome posesión el nuevo presidente- han sido feministas, antirracistas, el lobby gay y partidarios de la marihuana. Yo me lo haría mirar, porque si estos son los míos…Y en la esfera internacional, aún peor. La progresía internacional se nos ha hecho librecambista, llama populista a Trump y, atención, han convertido a Xi Jinping, en el mayor tirano del mundo. Es nuestro ídolo. Si China es el líder del futuro a lo mejor nos conviene volver al pasado.Al final, resulta que los progres, los pro-Obama, los anti-Trump, los mismos que se consideran maestros de democracia son los que se van a cargar la democracia. No han conseguido tumbar a Trump antes de tomar posesión. Lo intentarán luego.Hispanidadredaccion@hispanidad.com