La idiocia cunde en España. Primero era Manuela Carmena, ilustre alcaldesa de Madrid,  quien iba a curar el cáncer del terrorismo islámico con "diálogo".Su concejal más intelectual, el insigne Guillermo Zapata (en la imagen), quien ha dado un paso más: el terrorismo islámico se arregla con educación. Probablemente, con la buena educación de Pedro Almodóvar. ¿O era la mala?Hispanidadredaccion@hispanidad.com