La América más profunda queda reflejada en esta película independiente detrás de la que se encuentran los mismos productores de Pequeña Miss Sunshine (al parecer, tienen especial fijación por poner en sus títulos sol brillante ) y la directora de Sylvia, la biografía de la relación mantenida por el matrimonio formado por la poeta Sylvia Platt y el escritor Ted Hughes.
Rose es una madre soltera que intenta sacar adelante a su problemático hijo Oscar y a su inestable hermana Norah. No lo tiene fácil porque vive de limpiar casas. Aunque en el instituto, Rose parecía que se iba a comer el mundo, con los años, tanto su vida personal como profesional ha sido una sucesión de desastres. Para salir del bache económico, su amante (un antiguo compañero de instituto ahora policía) le propone que limpie escenas de crímenes, un trabajo algo sórdido pero bien remunerado
Comedia dramática con toque de humor negro, Sunshine Cleaning ofrece la cara más amarga de los Estados Unidos: la de unos perdedores que intentan sobrevivir como pueden a circunstancias adversas, nada que ver con el sueño americano que solemos contemplar en tantas películas de nacionalidad estadounidense. Quizás por ello esta película indi rebosa humanidad por los cuatro costados. Es fácil sentir empatía por Rose (encarnada por Amy Adams) a la que todo le sale mal a pesar de su esfuerzo personal, incluso por ese desastre con patas que es su hermana Norah (Emily Blunt), marcada por el trágico fallecimiento de su madre en la infancia (la mayoría de los problemas emocionales provienen de esa época de nuestra vida) Está muy bien narrado cómo estas dos jóvenes, precisamente a través de su surrealista trabajo de limpieza, recorren un camino que les hará realizarse como personas.
Sunshine Cleaning tan sólo dura 91 minutos y se ve de un tirón. Sería mucho más redonda si no se recrear tanto tiempo en el adulterio que mantiene la protagonista con el policía que, eso sí, transmite el desencanto que provoca una relación que no va a ninguna parte.
Para: Adultos a los que les guste contemplar películas independientes americanas que muestran la cara más real de EEUU.