• Insiste en su tesis y asegura que sus razonamientos son objetivos.
  • Una Cataluña independiente se encontraría con unos pasivos en euros y unos activos en una moneda devaluada.
  • Sus bancos, Caixabank, Sabadell y Catalunya Caixa, sufrirían una devaluación salvaje y tendrían que trasladarse a Madrid.
  • Sin embargo, el gobernador ha querido aclarar que su razonamiento es técnico, no político. Es decir, que no hace otra cosa que describir la realidad.

Sólo han pasado 24 horas desde que el gobernador del Banco de España, Luis María Linde (en la imagen) afirmara que la independencia de Cataluña supondría su quiebra y ya ha tenido que salir al paso para explicarse. Y lo ha hecho presionado por el Gobierno de la Generalitat.

Un detalle: este martes, antes de su intervención en el Foro Nueva Murcia, TVE le ha entrevistado en un aparte para que pudiera explicar sus palabras del día anterior. Está claro que quería explicarse.

En cualquier caos, Linde ha vuelto a repetir sus argumentos: una Cataluña independiente se encontraría con unos pasivos en euros pero con unos activos en una moneda devaluada. "No es lo que yo pienso. Son las reglas del Banco Central Europeo", ha recalcado.

De esta manera, los tres bancos con sede en Cataluña, Caixabank, Sabadell y Catalunya Caixa, sufrirían una devaluación salvaje y tendrían que trasladarse, por ejemplo, a Madrid. Y es que, según la normativa europea, "si un territorio pequeño se separa de un territorio grande, los bancos con sede en el territorio pequeño no podrían seguir financiándose en el Banco Central Europeo", explicó Linde este lunes.

Palabras que ha contestado este martes el presidente catalán, que ha pedido más prudencia a Linde en sus valoraciones políticas. Sin embargo, el gobernador ha querido aclarar que su razonamiento es técnico, no político. Es decir, que no hace otra cosa que describir la realidad.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com