Sr. Director:

Soy cristiano convencido y practicante que vivo mi fe desde el máximo respeto e intentando que se traduzca en una mejora de la sociedad que más cercana me queda.

Ante todo esto de los centros concertados, la libertad de religión, las financiaciones de la Iglesia y toda esa movida que se está montando yo me pregunto ¿a qué viene tanto miedo? ¿Por qué tanta persecución? ¿Acaso la Iglesia no hace cosas buenas?

Señores si aunamos esfuerzos y nos aprovechamos de los puntos fuerte de cada uno creo que todos ganaremos y no estaremos cada vez más divididos y recelosos. Así no avanzamos. Se nos llenará la boca de hablar de tolerancia y pluralismo pero si empezamos por hacer una guerra de religiones-no religiones no vamos por buen camino.

Pedro Villegas Reina

pevire@terra.es