Como ya hemos informado, el ministro de Defensa, José Bono ha convertido al régimen venezolano de Hugo Chávez, en su aliado para aumentar su poder en Iberoamérica y, de rebote, en España, sigue las mismas técnicas de Felipe González, quien de la mano del mexicano Carlos Slim se ha convertido en una figura clave del mundo hispano, como asesor áulico de un buen puñado de presidentes. De hecho, las relaciones entre Bono y González no pueden ser peores: ambos compiten por la influencia en Hispanoamérica. Por eso, las durísimas declaraciones de Aguirre, impropias de un diplomático, por otra parte, que ha llegado a acusar a Zapatero de rearmar a Hugo Chávez y de ser un ingenuo con Fidel Castro, preocupan más a Bono que a Zapatero.
Seguiremos informando.