En la SER, Carlos Francino señalaba que el del 11-M es un juicio que ha dado "nuevos y determinantes elementos que desmontan esa llamada teoría de la conspiración".
Eduardo San Martín, también en la SER, subrayaba que el juicio del 11-M está poniendo de relieve que hubo "negligencias graves" por parte de las fuerzas de seguridad del estado "pero que no tienen nada que ver con el núcleo duro de los hechos". "A uno le queda una sensación de verdadera inquietud por no haber sido capaces de detectarlo. Sería de desear que todo eso se corrija", añadía. Y Carlos Elordi se preguntaba, a la vista de las declaraciones en el juicio, "qué pasa en la policía, si a esto añadimos los problemas de la guardia civil en el asunto de los explosivos de Asturias, ha habido un problema con las fuerzas de seguridad que hay que seguir muy de cerca porque nos interesa a todos".
En la COPE, Federico Jiménez Losantos se refería a la enfermedad de María San Gil, la presidenta del PP vasco, "un partido que no se merece algunos de los dirigentes que tiene. Esta gente heroica no se merece los chorizos que están a punto de quedarse con el partido, una gente habituada al sacrificio. A ver si un día (María San Gil) aterriza en Génova y pone los puntos sobre las íes, pues eso que saldremos ganando". Y sobre la sesión de ayer en el congreso, Losantos destacaba que "Rajoy en el parlamento, estuvo sensacional, si tuviera valor como dirigente político, sería como José Tomás, antes de retirarse. Ayer, en la sesión de Endesa, le dio a Zapatero hasta en el carné de identidad, una cosa espectacular".
José Alejandro Vara, también en la COPE, señalaba sobre Maria San Gil: "una mujer heroica en el PP, una lección de dignidad". Y añadía, sobre el fichaje del PP balear, la escritora María de la Pau Janer: "me gustaría mencionar a otra mujer del PP, que llega a la lista de Jaume Matas y lo primero que hace es ciscarse en el PP, en el partido al que estás llegando".
En la misma emisora, Pedro J. Ramírez apuntaba que "el fichaje de Maria de la Pau era una buena idea, porque en Mallorca hay muchas sensibilidades y en la medida en que el PP sea capaz de integrarlas, me parece bien, debería existir espacio para independientes. Ahora bien, lo que no puede ser es que (Matas) haga ese fichaje sin pactar la reglas de juego con la candidatura, no puede ser que el sentido de la incorporación sea repudiar lo que el PP representa en el conjunto de España".
Carlos Herrera, en Onda Cero, le enviaba un abrazo a María San Gil: "dijo que ha tenido cáncer de mama, y que tiene que descansar, lo dijo con mucha serenidad". "Hoy respirarán muy aliviados los adversarios de María San Gil", porque "no se ha rendido a los batasunos, no les ha hecho el caldo gordo, no les ha comprendido, y además, es la que ha tenido que soportar y tragar carros y carretas".
Herrera añadía sobre el juez Garzón -por un descuido suyo a lo mejor vuelven a manos batasunas algunas herriko tabernas-, que "nos debe una explicación y también a Grande Marlaska, por el gesto poco cortés que ha tenido al echarle la culpa por lo de las herriko tabernas". "Si las herriko tabernas no han escapado al control ha sido por casualidad o porque no han estado atentos. Y el juez Garzón tiene que dar no excusa pobres sino de otro tipo". "O hubo, un descuido de un juez que normalmente es incansable y trabaja y de qué manera, o es que resulta que es muy sensible a la orientación política del momento: con el PP ilegalizaba a Batasuna y con el PSOE legaliza la izquierda abertzale".
Gómez Marín, en Onda Cero, decía sobre el juez Garzón que "habría que pensar en qué espera Garzón de cada gobierno en cada momento". "Es una persona muy rara, su actitud ante el caso Gómez de Liaño fue de todo menos equilibrada". "El juez Garzón ha hecho grandísimos servicios, pero también ha dado patinazos, como cuando hizo detener un barco en altamar que no tenía nada dentro". "Es un juez con luces y sombras" y "sigo pensando que es un juez cono mucha valentía, pero no se nos puede pedir que seamos garzonólogos".
Para Carmen Gurruchaga, en Onda Cero, "Garzón se ha descuidado, se ha equivocado y nadie va a por Garzón, Garzón parece el juez sagrado". "Es capaz de hacer un acto valiente y lo contrario, depende un poco de quién esté en el gobierno". "Hay una opinión generalizada de que es un nefasto instructor".
Justino Sinova, en la misma emisora, señalaba sobre Garzón que "ha hecho cosas muy buenas y otras muy malas. Ha sido un juez muy valiente en algunas ocasiones, yo le he defendido muchas veces". "Estamos viendo a un Garzón obsesionado por un afán de presencia pública y está haciendo cosas que dejan que desear. Ha sido el propio tribunal Supremo el que le ha llamado la atención". "Hay dos jueces en Garzón, uno muy bueno, y útil para la lucha contra el terrorismo y hay un segundo juez que tendría que rectificar su actuación y dedicarse más al juzgado".
Y Albert Montagut señalaba también en Onda Cero que es "demasiado evidente en todas sus intenciones, muy públicas". "Hay luces y sombras". "Como sombra, sus pasos a la política y su regreso a la judicatura y su gran éxito, aparte de la lucha contra el terrorismo, sería ese bloqueo que consiguió de Pinochet que fue una victoria para la democracia". "Una frase del jefe del Tribunal Supremo de EEUU sobre cuál es el papel de los jueces: dice que un juez es como un árbitro de fútbol y cuando termina el encuentro, la gente tiene que preguntarse quién era el árbitro. Esto no pasa con Garzón. Al que más se le ve es a él".