Sr. Director:

 

Existe una presión sobre los medios para que no den la palabra a los que critican las reivindicaciones de los homosexuales. Y en las salas de redacción se ejerce una censura en nombre de lo políticamente correcto, en relación con la homosexualidad. 

 

Algunos medios dan de esa forma solamente la palabra a aquellos que militan por el derecho al "matrimonio" homosexual y a su adopción de niños, eliminando sistemáticamente los otros puntos de vista. Grupos homosexuales ejercen un acoso a escritores, especialistas e incluso políticos que intervienen en este debate utilizando de forma encantatoria la supuesta "homofobia", nuevo oprobio que echa a la vindicta popular a todo aquel que no pase por los clichés de moda. Un autoritarismo de costumbres, cuando menos peculiares, irradia progresivamente a toda la sociedad y milita curiosamente para que los homosexuales ocupen más y más puestos de responsabilidad a fin de liberarnos de los "heterosexistas". Esto no es un buen augurio para una sociedad democrática: nos olvidamos de lo que ya los antiguos sabían sobre el ejercicio de la autoridad. En nombre de la homosexualidad se instaura una policía de las ideas: ¿es que vamos hacia un pensamiento totalitario? ¿Vamos hacia la restauración del delito de opinión en nombre de la persecución a la homofobia?

 

Nos quieren hacer creer que los que adoptan la forma de vida homosexual están continuamente amenazados.

 

Uno se acuerda del slogan: "miente, que algo queda".

 

Estamos en el ámbito de la manipulación de la opinión pública. Hay que constatar el encarnizamiento obsesivo con el que se diseca toda palabra y que muchos homosexuales están contra el matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopción de niños.

 

La única respuesta que los poderes públicos pueden dar es NO AL MATRIMONIO HOMOSEXUAL como lo ha recordado el anterior primer ministro francés, el socialista Lionel Jospin: "No hay equivalencia entre la relación de dos personas del mismo sexo y la formada por un hombre y una mujer. Sólo esta última puede calificarse de matrimonio"

 

Gema Arranz

 

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