Desde hace una década el cine ha conseguido hacer todavía más popular el nombre de la escritora británica Jane Austen. Y esto se debe a que sus novelas, ágiles y frescas, son una radiografía de su época y lo que es más perdurable: de las virtudes y defectos de los personajes previctorianos que pueblan sus relatos.
La joven Jane Austen narra los años juveniles de la escritora antes de dedicarse en cuerpo y alma a la literatura. Y contemplando esta exquisita y muy "british" biografía el espectador entiende perfectamente que de la pluma de esta admirable mujer salieran esos relatos románticos y llenos de agudeza. Así, si han leído (o han visto) Orgullo y prejuicio, Sentido y Sensibilidad o Emma, se darán cuenta de que en ellos la Austen describía situaciones que conocía de primera mano: alrededor del rol de la mujer a finales del s. XVIII o sobre los matrimonios de conveniencia.
De tal manera que, al margen de que la película es deliciosa en su desarrollo y cuenta con una cuidada puesta en escena, La joven Jane Austen cautivará a los aficionados/as a las películas de época porque en ella se ofrece una visión de la escritora en sus años juveniles muy diferente de la que siempre se había transmitido. Así, Jane Austen no fue una mujer retraída y solitaria que hablaba del Amor "de oídas", por el contrario fue una joven que vivió un gran romance y que, gracias a su inteligencia, tuvo varios pretendientes que suspiraban por su mano.
Anne Hathaway, famosísima desde su trabajo en El diablo se viste de Prada, realiza un buen trabajo metiéndose en la piel de la rebelde Jane Austen, una mujer poco convencional para su tiempo y con una vida sentimental tan romántica como las que narraba en sus novelas.
Para: Los Aficionados a las novelas de Jane Austen y a los relatos de época. Disfrutarán mucho.