¿Puede entenderse que La Caixa vende su participación de control en la joya de la corona inmobiliaria, es decir, en Colonial, a la Inmocaral de Luis Portillo? La noticia dejaba helado a todo el sector en la tarde del martes. Y es que, en efecto, cuando todo el mundo preveía la expansión de Colonial por ejemplo, a través de Metrovacesa, La Caixa vende.
Y una de las razones para esa venta es que la entidad catalana no quiere que se le escape Abertis. Florentino ya posee el 25% de la concesionaria, por algo más de un 20% La Caixa, y justo en el momento de fusionarse con Autostrade, si es que don Romano Prodi lo permite. Además, Colonial es una de las obras de las que más orgulloso se siente el presidente de Repsol YPF, Antonio Brufau.
Florentino es agresivo, y sabe sacar rendimiento a sus inversiones, siempre exige incluso más poder del que le otorga el dinero expuesto. Así que La Caixa tuvo que revolverse en un palmo y renunciar a su inmobiliaria, aunque, eso sí, por el bonito consuelo de 3.761 millones de euros, una cantidad que no todo el mundo gana algunos fines de semana.
En cualquier caso, ya saben: si quieren conocer la participación final de los socios en la futura Abertis-Autostrade tendrán que dividir el porcentaje por dos.