El aborto no es la solución. Sigue siendo un delito perseguible de oficio. Pero los casos no llegan a los juzgados. En primer lugar, porque como afirma Julián Marías, la aceptación social del aborto es el cáncer más importante de la convivencia social y política. Pero, además, porque en demasiadas ocasiones la mujer acaba con tal trastorno psicológico que en lo último que piensa es en acudir a la comisaría.
Pues bien, hay alternativas al aborto provocado y así se manifiesta en www.hayalternativas.com. Hace falta desarrollo del estado social para que ninguna madre se vea abocada a acabar con la vida de su hijo ante la falta de apoyo social.
Hace falta que la mujer reciba un correcto consentimiento informado sobre las consecuencias físicas o psíquicas que probablemente le cause el aborto. Ya es hora de que se cumpla lo dispuesto en
Hace falta que se cumpla lo dispuesto en la citada sentencia del TC sobre el derecho de los profesionales médicos a objetar según lo estipulado en el artículo 16.1 de