Garmendia tiene una frase estudiada para cuando le preguntan sobre su eventual salida del Gobierno: Al día siguiente de salir pensará qué voy a hacer. ¡Como si tuviera que pensarlo la ministra más rica del Gobierno! Sus empresas le esperan. Todo iba bien hasta que Melchor Miralles le pregunta si dimitirá en caso de que el presidente no le deje salir del Gobierno. Respetaré siempre la decisión que adopte el presidente del Gobierno, responde. Pero no niega que haya pedido a Zapatero salir del Gobierno cuando se produzca la próxima remodelación. Aquí le ha fallado el subconsciente.
Por lo demás, Garmendia ha vendido la necesidad de apostar por la excelencia. No los mejores centros de España, sino los centros de España que están entre los mejores del mundo. En cuanto a la cuestión presupuestaria, asegura que estaremos cerca de la congelación en Ciencia. Un paso adelante en un contexto de recortes severos. Nuestro país está obligado a un ajuste. ¿Economía intervenida, protectorado económico?
Andrés Velázquez
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