Sr. Director:
El próximo día 5 de junio termina el plazo de enmiendas de la futura Ley de Bienes Tangibles que sustituirá a la tristemente conocida Disposición Adicional IV. Se advierte ya en la exposición de motivos que el Gobierno no quiere que haya un mínimo resquicio de duda sobre quien es el responsable de las hasta ahora presuntas estafas filatélicas, el cliente, y así lo manifiesta cuando atribuye a este poco interés en lo que compra cuando el objeto del contrato tiene pacto de recompra.
A raíz de lo acontecido tras la operación Atrio, que llevó consigo las intervenciones sobre Fórum y Afinsa, se evidencia que la Disposición Adicional IV no ha servido para nada y ante esto se disponen a construir un marco regulador para el sector..., después de 27 años funcionando estas dos empresas y múltiples estafas de otras empresas del sector, valgan como ejemplo Cafisa y Banfisa queda demostrado que los consumidores estábamos protegidos por una simple declaración de intenciones totalmente ineficaz ya que aunque increíble con los precedentes anteriormente citados, nunca se preocuparon de velar por los consumidores a los que supuestamente protegía esta disposición.
Ahora el Gobierno pretende regular un sector que si no ha muerto está dando sus últimos coletazos (Arte y Naturaleza), y aunque parezca paradójico esto puede ser lo que salve a muchos ciudadanos de perder sus ahorros en un futuro, ya que esta novedosa ley de Bienes Tangibles, que llega con 27 años de retraso, adolece errores del pasado que no están dispuestos a corregir por la sencilla razón de que sería reconocer la responsabilidad del Estado, cosa que desde el Gobierno niegan rotundamente. Uno de estos errores es seguir empecinados en que estas empresas son mercantiles y no financieras, y que sean las CCAA las responsables de aprobar las normas de desarrollo y ejecución de la futura ley. Parece mentira que el Gobierno, que no duda en responsabilizar a estas directamente de la supervisión de Fórum y Afinsa con el resultado que todos conocemos y siendo público que las CCAA han manifestado que no tienen capacidad para realizar esa supervisión, prefiera obstinarse en ello para intentar eludir una responsabilidad que sabe que tiene.
No somos los únicos que creemos que seguir manteniendo que las empresas que comercializaban bienes tangibles deben dejar de ser mercantiles para tener la denominación que más se ajusta a la realidad, la de financieras. Esta posición ha sido adoptada por el Defensor del Pueblo, Don Enrique Múgica, que expuso en el informe anual del año 2006, remitido al Congreso, que sea el Banco de España y la CNMV quienes regulen este tipo de empresas en sustitución del Ministerio de Consumo.
También considera el Defensor del Pueblo que las diferentes administraciones actuaron de forma "tardía" en la intervención o información al consumidor.
Este grupo de verdad espera que el Gobierno recapacite y despliegue todos sus medios en redactar una ley de Bienes Tangibles que verdaderamente proteja a los consumidores en lugar de estar cubriéndose las espaldas.
Si siguen por este camino será pan de hoy y hambre para mañana.
GRUPO E-MOVILÍZATE
Afectados Filatélicos
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