Alaba a Brufau y asegura que no está vendiendo Repsol y que nunca quiso venderlo. No ha habido nada ni hay nada con Caja Madrid. Otra cosa es colaborar.
La palabra maldita apareció de nuevo en boca de un banquero notable. Y en esta ocasión sin eufemismos. Durante la presentación de resultados correspondientes al ejercicio 2009, celebrada en Barcelona, en la mañana del viernes, el presidente de La Caixa, Isidro Fainé, aseguró que para salir de la crisis hay que volver a hacer banca doméstica, hagamos la banca de siempre y olvidémonos de la especulación. Ya son muchos los que se atreven a censurar la locura especulativa, aunque suelen emplear eufemismos. Que yo recuerde, es la primera vez que un banquero importante empela el término maldito, especulación, e indirectamente señala a los especuladores como los culpables de la crisis económica: Volvamos a la banca de siempre, la que ayuda al bien común y financia la economía real, y reduzcamos al mínimo los derivados, titulizaciones, posiciones cortas, subprime, bonos basuras, etc.
Más: el desastre de la política económica de ZP sitúa al mundo empresarial bajo los dictados del político. De hecho, Fainé, acompañado por el director general, Juan María Nin, recibió muchos dardos de los periodistas presentes sobre la política económica española y sobre la labor del Gobierno ZP. Por ejemplo, Hispanidad le preguntó si apoyaría un Gobierno de concentración entre los grandes partidos para afrontar la crisis: No estamos en las concentraciones bancarias así que como para meternos en eso. Lo cierto es que Fainé se negó a criticar a ZP, eso que tanto busca el PP, pero sí aseguró, la enésima pregunta sobre la cuestión, que el respetaba mucho al presidente del Gobierno, para añadir, acerca del desprestigio de España que hay dos cosas ciertas que nos hacen mucho daño: el déficit público del 11,4% y el paro.
El otro asunto estrella de la comparecencia fue Repsol. Empecemos por el final. Cuando, acosado por las preguntas, Fainé optó por asegurar que su paquete en Repsol, directa e indirectamente próximo al 15%, no se ha puesto en venta nunca ni lo está ahora. La pregunta es. ¿Lo estará en unos meses?
En cualquier caso, sólo tuvo palabras para alabar a Antonio Brufau, que fue un buen presidente de Gas Natural y ahora es un buen presidente de Repsol.
Por su parte, Fainé aclara: no, no ha habido ni hay nada con Caja Madrid. Otra cosa es que lleguemos a un acuerdo de colaboración. Dicho de otra forma, la gran fusión cajera no está en las mentes de La Caixa, que ahora mismo, sería la entidad absorbente. Hay que esperar a que Rodrigo Rato realice su tarea. Entidad absorbente no sólo porque es más grande sino porque es más rentable.
Lo curioso es lo que dice La Caixa, la misma entidad que asegura que habrá concentración de cajas y de bancos.
La verdad, mejor que no se fusionen Caixa y Caja Madrid porque eso sí que sería el final de las cajas de ahorros.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com