La parte afectada en España por las subprime asciende a 60 millones de euros de los 1.300.000 millones de dólares El gobernador del Banco de España comparecía en la mañana de este martes en la Comisión de Economía del Congreso a petición del PSOE. Se trataba de negar la comparecencia de Solbes para que MAFO apoyara al Gobierno frente a los ataques de la oposición. "La estrategia de hacer como que no pasa nada no ha funcionado, porque la mera comparecencia extraordinaria y circunstancial del gobernador es ya de por sí una novedad e indica que algo pasa", señala Gaspar Llamazares.

Mucho morbo tenía saber si MAFO se ubicaba en la ‘Champions League' de Zapatero o en la prudencia de Solbes. Por supuesto, ha apelado a la prudencia, dado que estamos ante una incertidumbre. "No sabemos hasta qué punto puede afectar esta crisis de confianza". Sí ha señalado sin embargo algunos datos tranquilizadores:

Las provisiones por insolvencia de las entidades financieras españolas se encuentran dotadas al 200% cuando la media en la UE es del 63%. Por cierto, que no hay previsión del Banco de España de relajar las provisiones a principios del próximo curso tal y como anunció el subgobernador del BE, José Viñals, este verano.

El impacto de los 1.300.000 millones de dólares afectados por las ‘subprime' es de 60 millones de euros, "una cifra insignificante", frente a los 1.700 millones de euros afectados en Italia.

Las entidades financieras españolas consumen 18.000 millones de euros de los 450.000 millones inyectados por el BCE. Es decir, han sido las entidades menos necesitadas de liquidez.

La conclusión es obvia. "Somos los que estamos mejor preparados para afrontar la crisis". Y eso, a pesar de que -como insiste Arias Cañete- somos el país más endeudado de la zona euro. Sin embargo, MAFO insiste en su llamada a la prudencia y la cautela, dado que las incertidumbres persisten. "No conocemos todavía el impacto de la crisis", pero de momento "el interbancario está secado". ¿No ocurre nada? Si el escenario central se mantiene (cosa que no puede asegurar), se producirá una desaceleración suave o lenta "que deseamos y estamos buscando", es decir, descenso del peso de la construcción, desaceleración del crédito, etc. Eso, tras afirmar que en el sobreendeudamiento de las familias tampoco es tan grave porque al fin y al cabo se convierte en incremento de patrimonio neto.